Novela original en japonés por: 金斬児狐 (Kanekiru Kogitsune)
Re:Monster
Traducción: Xeniaxen
Traducción: Xeniaxen
Día 611
(parte II)
Como consumen una gran cantidad de poder mágico y lo recuperan en un corto periodo de tiempo, han mejorado en algo tan básico como la cantidad de poder mágico que pueden albergar en sus cuerpos. Además, ganan experiencia luchando contra monstruos, lo que les ayuda a subir de nivel. Sus habilidades respecto a la creación de gólems también han mejorado, naturalmente.
Sé que el trabajo es duro, pero espero que un día se den cuenta de cuánto han crecido y eso los motive.
Por la noche, tenía ganas de ir a la cena a la que me habían invitado. Asistí con Chabomaru en mi cabeza y el joven deforme, que es el subdirector comercial, así que saqué mi golemkrad por primera vez en mucho tiempo y recorrimos las calles iluminadas por las farolas.
La cena tuvo lugar en el área central de Sectriad, la Ciudad del Libre Comercio, dentro de la Torre Mágica del Comercio "Waldtor", diseñada y construida por el arquitecto mágico gigante Gielgud Na, un genio que ha marcado toda una era en la construcción.
La Torre Mágica del Comercio es, en pocas palabras, un artículo mágico de tipo instalación comercial multipropósito y súper gigante. Su apariencia es la de un mega edificio de 300 pisos que imita la estructura de un gen de doble hélice. (NT: Como se suele representar el ADN.)
Es tan alta que supera las nubes. Para ser un edificio construido por personas, su altura por sí sola es de una escala extraordinaria. Aunque parece que hay edificios similares en zonas donde residen razas grandes como los gigantes. Eso me hizo darme cuenta de lo mucho que todavía no sé acerca de este mundo.
Se dice que el gigante Gielgud Na ha diseñado y construido edificios parecidos. No obstante, una cosa que hace esta torre un poco diferente a las demás es que también es un artículo mágico.
Al igual que hay artículos mágicos con diferentes habilidades, como una espada cubierta de llamas o una armadura que mejora tus habilidades físicas, la Torre Mágica del Comercio "Waldtor" es un artículo mágico de tipo edificio. Es tan grande e intrincado que es difícil de asumir, pero fue creado por un genio que invirtió la mayor parte de su vida en este proyecto. La habilidad que tiene es [Fluctuación de la Estructura Interna].
Estructuralmente, tiene partes inmóviles, como la forma de doble hélice exterior. Los numerosos ascensores mágicos están ubicados a intervalos regulares, así como los innumerables pasillos que recorren todo el edificio. El resto se puede reorganizar libremente. Es lo que llaman bloques de espacio para inquilinos, y se ve que hay de tres tipos.
- Del que hay menos cantidad, pero que es el más grande en tamaño, ya que tiene varias decenas de metros de altura, está diseñado para ser habitado por titanes.
- El de tamaño intermedio está diseñado para albergar especies de alrededor de 10 metros de altura, más pequeñas que las del tamaño grande.
- Y el más pequeño y numeroso está diseñado para albergar personas corrientes.
Es una torre comercial, por lo que los bloques de espacio para inquilinos que la conforman se alquilan a muchas empresas. Cuanto más alta sea su facturación, más alto se colocan, y como más altos estén, más beneficios tienen. Establecer una tienda aquí muestra un gran estatus para las empresas de Sectriad, de la Ciudad del Libre Comercio. Por ello, en ella se venden una cantidad extraordinario de productos. Se dice que aquí puedes conseguir casi todo lo que quieras.
Sin embargo, hay un lugar como este al que no puedes entrar a menos que seas de cierto rango: el piso superior, de 280 pisos o más que tiene. Y allí es justo donde habíamos quedado. El restaurante creativo de teppanyaki [Gran Torre Attable]. (NT: Teppanyaki es un tipo de plato de comida japonesa que utiliza una plancha de acero para cocinar los alimentos. La palabra deriva de yaki, que significa «asado» o «hecho a la plancha» y teppan, que significa «plancha de hierro». Fuente: Wikipedia.)
Es un restaurante de ultra lujo donde Attable, un chef prodigio que se ha estado formando durante años y posee la [Protección Divina] del [Dios de la Cocina], cocina los mejores ingredientes con las mejores técnicas y los sirve en un ambiente inmejorable.
Aunque mucha gente quiere visitarlo una vez en la vida, solo unos pocos elegidos consiguen llegar hasta la entrada del restaurante y, aun así, se dice que las reservas se llenan con varios años de antelación. Por eso, aunque hubiera tenido un gran interés, sería un restaurante que no habría tenido la oportunidad de visitar. Pero era el lugar que me habían preparado para la ocasión.
Me pregunto qué querrán contarme... pero valdrá la pena participar solo para poder comer aquí.
El joven deforme y yo llegamos sin problemas a la Torre Mágica del Comercio "Waldtor" y subimos al ascensor mágico que va directamente al piso superior. Un rato después de sentir la sensación única de ascender, llegamos a nuestro destino.
Lo primero que vimos cuando se abrió la puerta fue un cartel informativo. Indicaba dónde estaban ubicadas las tiendas de esta planta, y una de ellas tenía escrito en oro el nombre de Gran Torre Attable. Siguiendo las instrucciones, caminamos por un lujoso pasillo que se extendía hacia ambos lados, y pronto encontramos el sitio.
Cuando nos acercamos, un empleado vestido con uniforme blanco y negro salió y nos preguntó el nombre. Respondimos y confirmaron nuestra identidad inmediatamente antes de hacernos pasar.
El interior del Gran Torre Attable, escondido detrás de una puerta que impedía el paso a los desconocidos y de un pequeño pasillo, estaba decorado como un bosque de cristales. La luz principal era un artículo mágico que brillaba como una luna llena sobre la cocina circular en el centro del establecimiento. Su suave luz se reflejaba en los árboles de cristales de varios colores y en las piedras minerales que decoraban la sala. Son uno de los materiales más caros que conozco. Hay que ser muy meticuloso y se necesita tecnología avanzada para procesarlos. Estaban colocados de tal manera que se armonizaban como un todo. Era tan místico que no pude evitar contemplarlo con asombro.
Se respiraba un aire muy puro y el leve aroma de los árboles de cristal parecía tener un efecto relajante. Si cerraba los ojos, incluso podía tener la ilusión de estar en un bosque de árboles de cristal de verdad.
En los asientos, colocados a lo largo de la cocina circular en el centro, ya estaban el presidente enano, una hermosa mujer con la piel de color negro y plata que nunca había visto antes, así como un frío y ardiente león azul, que debía de ser su guardaespaldas.
El león azul, con su magnífica melena y azul ardiente, medía fríamente unos tres metros de altura. La gruesa armadura muscular de su enorme cuerpo era claramente visible a pesar de que estaba cubierta por un elegante traje. Sus agudos ojos azules nos observaban silenciosamente mientras entrábamos en el restaurante.
Con solo estar allí, infundía una presencia increíble, pero hubo alguien que llamó más mi atención que él: la hermosa mujer a quien protegía.
Llevaba su cabello plateado, claro y largo hasta la cintura, atado en una cola de caballo con un adorno de serpiente dorada. Su hermosa apariencia cautivaba instantáneamente a cualquiera que la veía. Sus ojos plateados parecían atraerme mientras los miraba. Su piel, blanca como la nieve virgen, era misteriosa y parecía rechazar el tacto. Sus labios carnosos, pintados de color rojo sangre, tenían una magia oculta que me hacía querer tocarlos. También tenía un busto abrumadoramente grande y epicúreo, la cintura de avispa y caderas de aspecto suave, como un melocotón.
Su cuerpo, que irradiaba encanto femenino por todos lados, estaba envuelto en un revelador vestido negro que dejaba al descubierto su espalda, sus hombros e incluso sus muslos, a través de una abertura profunda. Sus piernas largas y delgadas culminaban en unos tacones altos rojos. Llevaba anillos, pendientes y collares engastados con grandes joyas, pero su encanto era tan fuerte que eso eran simples accesorios a su lado.
Con solo mirarla, uno pensaría que era la hija de un noble de alta cuna o la princesa de un país, pero aquí exudaba una presencia que fácilmente superaba la del presidente enano.
Por supuesto, no solo era una mujer hermosa. Oculto en su cuerpo, había un poderoso poder mágico, casi como un volcán. Además de esa aura única, su ropa y accesorios eran artículos mágicos, por lo que naturalmente pude adivinar su verdadera identidad.
La hermosa mujer era la presidenta de la compañía Diabolica, una de las Siete Asociaciones de Comerciantes Principales, la misma que había invitado. Todavía no sabía qué intenciones tenía, pero no sentía ninguna hostilidad por parte de ella. Es más, me miró con una sonrisa amistosa.
Fueran cuales fuesen sus verdaderas intenciones, intercambiamos saludos de manera educada y la cena comenzó, conmigo, la hermosa presidenta negra y plateada, y el presidente enano, que era amigo de ambos, liderando el acuerdo.
Mientras charlábamos sobre lo buena que estaba la comida, los cocineros seguían preparando platos en la cocina circular frente a nosotros. Había un artículo mágico en forma de plancha delante de cada asiento, por lo que pudimos disfrutar del proceso de elaboración en primera fila. Debo reconocer que me sorprendió bastante.
Sacaron un enorme bloque de carne de un artículo mágico con forma de refrigerador, y el chef Attable lo cortó con su cuchillo. Hizo unos cortes tan limpios que parecía que hubiera estado cortado desde el principio y los hizo volar sobre las planchas frente a cada asiento. Lo mismo ocurrió con las verduras que se sacaron después. Fue como ver una escena de cocina exagerada en un manga de cocina.
La única persona que cocinaba era Attable, un hombre adulto de unos treinta años. Completaba cada paso en un abrir y cerrar de ojos con una velocidad y precisión sin igual, como si pudiera estar en más de un lugar a la vez.
Era rápido y delicado, pero dinámico, por lo que era agradable tan solo observarlo. Además, el delicioso olor de los ingredientes que se cocinaban en las planchas rezumaba por todos lados, por lo que no pude evitar esperar con ansias a probarla.
Tragué saliva, pero luego noté algo. Al principio pensé que serían platos completos con pequeñas cantidades de comida en cada uno, pero al contrario de mis expectativas, nos sirvieron comida para aburrir. Era como si hubieran pedido todo el menú del restaurante y nos lo estuvieran sirviendo en un orden concreto.
Luego me di cuenta de que no solo ponían distinta cantidad de comida en cada plancha según el comensal, sino que el menú en sí era diferente. Le pregunté a Attable al respecto, y me dijo que el presidente enano normalmente elegía cuidadosamente qué plato comer, pero esta vez le había pedido que sirviera un menú creado por él mismo según lo que creyese que sería adecuado para cada invitado.
Attable dijo que, al vernos, determinó instantáneamente la comida que se adaptaba a nuestros gustos, así como a nuestra condición física actual, y lo preparó todo a medida y al momento. Para el presidente enano, platos que maridaran bien con el alcohol que le gusta. Para la hermosa presidenta negra y plateada, comida picante y rica en poder mágico. Como plato especial para Chabomaru, también sirvió un insecto de cristal entero asado que hace su nido en el árbol de cristal.
Además de ser deliciosa, la cantidad de mi comida era mayor que la de los demás, para que fuera suficiente para saciarme. Se lo curró tanto que la disfruté al máximo. Bebí mucho alcohol y me embriagué con platos insuperables y difíciles de describir.
La preocupación que tenía inicialmente se me quitó después de comer, beber y hablar con la presidenta hermosa negra y plateada, la organizadora de esta cena. Parece que su primer propósito era verme cara a cara. ¿Querría comprobar si soy de fiar? Existía la posibilidad de que nos enfrentáramos en el peor de los casos, así que supongo que también estaba tratando de ver qué pasaría.
Hablamos de muchas cosas, pero nada demasiado complicado, y la conversación se desarrolló armoniosamente de principio a fin. Hacia el final, el entusiasmo del presidente enano por la personalización tomó protagonismo y terminamos vendiéndole algunos gólems y piezas a la presidenta hermosa.
En fin, la comida y el alcohol fueron el mejor amortiguador para evitar conversaciones problemáticas, ¿no es así? Además, cuando nos íbamos, la presidenta me dio un licor de mazmorra como regalo de amistad. El presidente enano sintió celos de lo excelente que era el producto, así que espero seguir siendo amigo de la presidenta hermosa para que me regale muchos más.
Gracias Xe
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