¡NUEVA SERIE! Re:Master Magic - 1, 2 y 3

Como he ido diciendo hace varias semanas, estuve buscando una serie relacionada con la magia, y esta fue la que encontré. Tiene muy buena pinta por el momento. Los tres revisores que me han ayudado con los capítulos opinan lo mismo. En principio quiero hacer que sea un proyecto quincenal, porque priorizaré las otras dos novelas activas (Re:Monster y World Customize Creator). Pero con el ritmo que llevamos en WCC supongo que después de los pocos meses que quedan para terminarla podré dedicarme más a esta. Además, los capítulos son cortos, así que seguro que saco más de uno cada vez que publique.

Vayan a la página principal de Re:Master Magic para leer su sinopsis (enterarse de quiénes son las chicas de la imagen) y encontrar más información sobre la serie.

Por último, avisar que no en todos los capítulos hay imagen. De hecho, hay muy pocas imágenes de esta serie. Simplemente coincide que en el 1 y el 2 tenemos, pero la siguiente no es hasta el 8. Solo quería aclararlo.

Espero que les guste~


-Xeniaxen

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Novela original en japonés por: 謙虚なサークル (Kenkyona Circle)
Re:Master Magic

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Traducido al inglés por: KuroInfinity

Traducido al español por: Xeniaxen

Revisado por: AMarauder, Rounejo, Karou

Capítulo 1: Introducción a la magia

Congregación Mágica

La multitud de magos allí reunidos me alabó con sus aplausos.

“Mago Zeff Einstein, en reconocimiento y admiración respecto a su poderosa magia, le conferimos el título del mago escarlata más poderoso, la Llama de Llamas.”

“Jaja, gracias.”

“Esperamos que le haga justicia a este título.”

Ahora ya estoy bastante oxidado, pero sí, ese era yo, el mago que ostentaba el mayor título de la división escarlata, la Llama de Llamas.

Estuve entrenando para ser un mago escarlata desde que era niño, y merecía obtener ese incentivo por todos mis esfuerzos. Dediqué cada día de mi vida a la magia; el vino, las mujeres, el oro y el resto de tentaciones del mundo no significaban nada para mí comparado con el estudio de la magia escarlata. Tenía un sentimiento muy profundo por ella.

En medio del retumbante aplauso, el maestro de ceremonias bajó una mano lentamente, silenciando a la audiencia. Y entonces pude ver a una joven maga mirándome fijamente. Ella dio un fuerte golpe en el palco con su puño, causando furor popular.

No parecía un acto de malicia. Era su forma de reconocimiento hacia mí, regocijándose en el hecho de que yo lo merecía, pero que aún podía mejorar más. Y era también su forma de desprecio, indignada por ser una tonta, pero que aún podía llegar a ser como yo. ¡Tendría que ser muy eficiente para llegar a serlo!

Sin embargo, le estaba agradecido, ya que me animó a seguir esforzándome.

“¡Seguiré apuntando a lo más alto! Como la Llama de Llamas, prometo que seré el más poderoso de todos.”

El jolgorio de la gente volvió a envolverme en un vórtice de aplausos y alabanzas, y alcé mi mano derecha, gratificado. No paraban de oírse los disparos de los focos mágicos. El periódico de la Congregación Mágica se encargó de distribuir la noticia a todo el mundo. Ese año, las habladurías sobre el reconocido mago serían el tema principal de todos los medios.

Un año después...

Volví a la Congregación Mágica por el reciente hechizo llamado tasación mágica. Era algo que los magos podían usar para mesurar sus habilidades o talentos latentes, y así conocer qué sistemas mágicos eran más compatibles con ellos. La magia se divide básicamente en cinco sistemas o divisiones.

Magia escarlata. La magia del fuego, idónea para hechizos de ataque. Dominarla es agotador para el cuerpo.

Magia azul. La magia del agua, idónea para los efectos de soporte o interferencia. Precisamente, tasación mágica pertenece al sistema mágico azul.

Magia verde. La magia de la tierra y el espacio. Permitía controlar todo lo material. No hay muchas variaciones en este sistema, pero es magia muy poderosa.

Magia celestial. La magia capaz de interferir con la atmósfera. Permite controlar las corrientes de viento y los relámpagos. La naturaleza extravagante de esta magia la hace muy difícil de controlar, pero es extremadamente poderosa.

Magia espiritual. La magia de los ángeles y los demonios. Se dice que si se entrena lo suficiente, permite ponerse en contacto con Dios o el Demonio... No hay muchos practicantes de esta magia, y no se conoce mucho sobre ella tampoco...

Estos son los cinco sistemas mágicos. O, por lo menos, son los cinco sistemas mágicos principales que la mayoría de magos practicaba. De ellos, yo pertenecía a la división escarlata.

Y por supuesto que me interesaba mesurar mi potencial mediante tasación mágica. Quería demostrarles a todos lo bueno que era. Pese a que otros lo encontraron difícil de conjurar, yo lo dominé sin problemas y lo usé en mí mismo. Los resultados de la tasación del mago escarlata más poderoso galardonado con la Llama de Llamas fueron...

Zeff Einstein

Nivel 99

Nivel de magia escarlata: 62/62

Nivel de magia azul: 49/87

Nivel de magia verde: 22/99

Nivel de magia celestial: 22/89

Nivel de magia espiritual: 19/97

“¿Qué...?” abrí los ojos como platos. “¡¿Cómo puede ser que el mago escarlata más reconocido... tenga el menor potencial en la magia por la que destaca?! ¡Es inaceptable!”

Por muchas veces que lo comprobase, el número seguía siendo el mismo. Los niveles habían existido desde siempre, haciendo posible mejorar más rápido las habilidades. Pero en un momento dado, simplemente no puedes subir más de nivel. Es cuando alcanzas el límite de talento; el fin de tu entrenamiento.

Yo mismo hacía tiempo que había llegado al límite de talento. Siendo de nivel 99 empiezas a planteártelo. Sin embargo, ¿quién iba a pensar que las complicadas magias verde y espiritual serían en las que yo tendría el mayor potencial? Entonces cualquiera podría dominar la magia escarlata por completo, aún más que yo. Eso estaba mal.

No siempre había sido un hombre mayor... también tuve mi juventud. Y me negaba a aceptar aquello... ¡Yo no merecía un final como ese!

Toda la magia que había estudiado se había vuelto insignificante cuando ya faltaba poco para mi hora. Los frutos de todos mis esfuerzos e investigaciones habían perdido el sentido. ¡Prefería morir antes que acabar así! Pero no iba a morir. Por muy vacío que me sintiera por dentro...

Entonces, otro mago escarlata con un límite de talento mayor que el mío usurpó mi título de Llama de Llamas . Mi límite estaba en 62, y el suyo en 99. La Congregación Mágica dijo que yo ya no era merecedor del título, puesto que mi nivel era demasiado bajo. No pude decir nada en mi defensa. Ya había alcanzado mi máximo potencial, era hora de que otro mago más joven tuviese su reconocimiento...

Pero entregarle mi título...

Pese a que él tenía talento, sin experiencia de combate, no cabía duda de que ese don nadie perdería contra mí. Ellos no lo sabían, pero yo sí. No iba a rendirme tan fácilmente, seguiría en el camino de la magia hasta la muerte.

Sufrí hasta el final de entrenar hasta terminar devastado. En las puertas de la muerte, finalmente conseguí crear un nuevo hechizo. No había pasado tantos años esperando para acabar liberando la magia que había forjado en mi cuerpo.

“Salto Temporal.”

Mi espíritu abandonó mi cuerpo, viajando al pasado a través del espacio-tiempo.

Sin embargo, el hechizo todavía estaba incompleto, solo traspasó mi conocimiento, por lo que debía volver a aprender magia de nuevo. Por suerte, me gustaba entrenar.

Era inestable, sí, y no sabía lo lejos que me llevaría el hechizo. Pero si una cosa tenía clara, era que esta vez aprovecharía mi conocimiento y mi tasación mágica al máximo.

Mi conciencia desapareció rápidamente, todo se volvió blanco. Y...

“¡Zeff, vas a llegar tarde a la escuela! ¡Despierta!”

Sábanas blancas, la voz de mi madre, y el olor a sopa de miso... Había vuelto a mi adolescencia.

Volví a una buena época. La suerte parecía estar de mi lado. Aunque tenía dificultades para moverme. Honestamente, no pensaba que saldría tan bien. Podría decir que fue todo un éxito.

Señalé hacia la ventana con mi dedo índice, y dibujé el hechizo de magia escarlata elemental bola roja. Pero no se activó.

“No puede ser...”

Me concentré en mi cuerpo, pero las líneas de poder mágico que debían estar fluyendo en mi interior no respondieron bien. Tenía que arreglarlo lo antes posible. Por muy poco potencial que tuviese, ¡¿qué clase de mago era si no podía hacer magia?!

Pero por el momento estaba hambriento...

“Ah, ¡ya voy, mamá!”

Cuando bajé corriendo por las escaleras, vi la cara de mi madre por primera vez en mucho tiempo, y me puse a llorar. Al ver mi cara cubierta de lágrimas, mi madre se rió ligeramente. Y eso me produjo tanta nostalgia que impidió que dejase de llorar.

“¿Qué ocurre, Zeff? ¿Has tenido una pesadilla?”

“No... Es solo que... Estoy feliz. Eso es todo.”

“Qué niño tan gracioso.”

Yo, que había vivido hasta una edad avanzada, conocía de primera mano la dolorosa importancia del tiempo. No podía perder ni un solo segundo. Debía entrenar mi magia de manera eficiente esta vez.

Me sequé las lágrimas. Pero cuando volví a probar la comida de mi madre por primera vez en tanto tiempo, no pude evitar llorar de nuevo.

Capítulo 2: Líneas mágicas

“¡Que te vaya bien! ¡Cuídate!”

Después de comer ese nostálgico desayuno, mi madre me recordó que tenía que ir a la escuela. Desafortunadamente, tenía que ir. Pensándolo bien, me pregunto si habrá alguna escuela de magia en la capital. A propósito, las clases aquí eran temidas por los niños por algún motivo.

Al salir de casa, la imagen de la calle me hizo recordar mi infancia. La ciudad de Nanami era un buen sitio dentro del país. Aun después de crecer y emanciparme, todavía me gustaba volver allí de vez en cuando. Lo echaba de menos. Joder, con eso se me escapó otra lágrima.

¡Venga, en marcha!

“A liberar las líneas mágicas.”

Salí hacia algún lugar entre la colina y la escuela, ya que liberar las líneas mágicas me tomaría bastante tiempo y concentración.

Las líneas mágicas fluían a través del cuerpo entero del mago. Literalmente, eran líneas por donde la magia pasaba. Y la magia de un mago talentoso es abundante, por lo que debía repartirla en partes iguales por todo mi cuerpo.

Sin embargo, mis líneas mágicas ahora estaban como apagadas. Me fue imposible canalizar mi magia a través de ellas. Los que aspiraban a convertirse en magos normalmente solían pedirle a otro mago que liberase sus líneas mágicas, pero creía que si me concentraba lo suficiente podría hacerlo yo mismo. Era la segunda vez que lo hacía, al fin y al cabo. No debía de haber ningún problema.

Subí a un árbol e inspeccioné la zona de antemano, para asegurarme de estar cerca de la costa. Me senté en una rama y cerré los ojos, concentrado en mi espíritu. Sentí que algo recorría mi cuerpo. Podía sentir como mis líneas mágicas se abrían una por una.

Era una tarea delicada, podía sentir el sudor de mi frente bajando por mi rostro por el esfuerzo. Continué abriendo mis líneas mágicas una por una, y cuando terminé estaba todo sudado. Tomé una bocanada de aire. Apenas me quedaban fuerzas, y casi me resbalé. Había olvidado que estaba encima de un árbol...

Después de recuperar el aliento, me concentré en las líneas mágicas. Mi magia corría por ellas con fluidez. Había llegado la hora de usarla.

Con la mano tendida en frente de mí, imaginé una bola roja. Entonces nació una pequeña bola de fuego. Parecía esponjosa y flotaba al nivel de mis ojos. El fuego se movía irregularmente. Si paraba de proveerla con poder mágico, la bola se desvanecería.

Consumió prácticamente una décima parte de mi poder mágico. Un mago novato normal solo podría formar la bola tres veces. O bien si un niño fuese capaz de formarla, también podría mantener solo tres.

“Al final no fue en vano.”

No sería lo mismo que antes. El sol ya estaba empezando a bajar. Pensándolo bien, estaba un poco hambriento. Era la hora de comer lo que mi madre había preparado para mí. Pese a que no estaba tan delicioso como algo recién hecho, el estómago lleno de mi cuerpo del tamaño de un niño estaba satisfecho.

El yo del futuro había leído muchos pergaminos sobre magia. Creo que había leído todos los que se habían publicado hasta la fecha. Aunque ahora mismo casi no pudiese usar la magia, iría ganando poder a medida que creciera. 

‘Ah, ya que mi poder mágico se ha recuperado, podría usar tasación mágica.’

Zeff Einstein

Nivel 1

Nivel de magia escarlata: 1

Nivel de magia azul: 1

Nivel de magia verde: 0

Nivel de magia celestial: 0

Nivel de magia espiritual: 0

El consumo mágico de tasación mágica fue mayor que el de la bola de fuego. La escarlata y la azul estaban a 1 porque había usado esos dos hechizos. Me pareció curioso no poder ver el potencial mágico, pero probablemente se debía a mi bajo nivel. La magia mejora a medida que la usas, y el consumo baja a medida que mejoras. Probablemente necesitaba incrementar mi nivel mágico unas cuantas veces más antes de ver mi potencial mágico.

De todos modos, podía acordarme de algunos hechizos. Todavía estaba lejos de mi futuro yo, pero tenía muchos retos que cumplir. Miré hacia abajo y vi a una manada de críos corriendo hacia la escuela. Eso... iba a ser uno de mis retos. Es lo que tiene ir a la escuela.

Por algún motivo, tenía el mal presentimiento de que algo iba a ocurrir. ¿Qué era eso? Me lo saqué rápidamente de la cabeza, pero realmente noté algo. Bajé del árbol y me puse a andar hacia la ciudad. Entonces vi que alguien se me acercaba. Una chica con una melena negra desaliñada corría hacia mí casi sin aliento. Llevaba gafas y una sudadera que hacía que su voluminoso pecho botase con cada paso. Me fascinó por un momento antes de escucharla lloriquear.

“¡Zeff!”

Vale, era hora de usar la excusa que había preparado. Estaba a punto de soltarla cuando la chica tiró de mí violentamente hacia ella. Mi cara quedó completamente hundida en su pecho.

Mientras yo disfrutaba de esa sensación, noté que ella estaba temblando.

“Estaba preocupada...”

Seguía apretándome contra su pecho, que era comparable a unas ubres de vaca gigantes. Era una sensación agradable, pero casi no podía ni respirar. Y entonces recordé quién era. Mi maestra de primaria, creo que se llamaba Claire. Era muy popular entre los estudiantes, tanto chicos como chicas, y tenía muchos pretendientes. Tenía la cara hundida en el pecho de una maestra tremendamente solicitada.

‘Ahora que lo pienso, creo que nunca antes me había visto en una situación como esta...’

No pude evitar sonreír. Seguro que toda la escuela se habría alarmado por mi ausencia, por lo que mi madre y Claire se habrían asustado. Pero era una pérdida de tiempo preocuparse por ello, así que lo dejé estar. Necesitaba aprovechar el tiempo al máximo, ya que iba a necesitar bastante tiempo para hacer lo que quería. Pero supongo que podía compaginar la escuela con el entrenamiento. Mientras planeaba todo eso en mi cabeza, disfrutaba de la sensación de los pechos presionando contra mi cara.

Capítulo 3: Magia difícil

El día siguiente, me obligaron a ir a la escuela. Mi madre y Claire me riñeron tanto que ni siquiera pude levantar la cabeza para mirarlas.

La primera clase de una hora se me hizo eternamente aburrida, por lo que decidí echar una cabezadita en vez de atender.

Cuando terminó la lección, corrí directo al baño. No por necesidad, sino por practicar con la magia. Una vez dentro, cerré la puerta y me apoyé sobre ella, mientras me concentraba en enviar poder mágico a la palma de mi mano.

“Bola verde.”

De repente, creé en mis manos una bola de magia verde. Era magia elemental del sistema verde. El sistema mágico verde tenía un gran poder pero poca variedad de efectos. Pero yo todavía la había desarrollado lo suficiente para producir grandes cosas. Contra demonios de alto nivel, iba a necesitar hacer magia más difícil. La bola esponjosa de magia que levitaba sobre mi mano desapareció de repente cuando corté el suministro de magia.

Cogiendo aire, volví a concentrar magia en la palma de mi mano.

“Bola negra.”

Se creó una esfera negra de magia. Vibraba con afán. Era magia elemental del sistema celestial. Este sistema destaca por su rapidez, pero es difícil de controlar porque tiene mucho poder. También es bastante difícil de aprender.

Los dos hechizos se activaron en rotación consistentemente hasta que sonó la campana de la siguiente lección. Celestial y verde, apenas había usado esos dos sistemas en mi otra vida, pero iban a ser mis sistemas principales en esta, considerando que eran en los que tenía el mayor potencial.

Escarlata y azul eran fáciles de usar en cierto modo, pero tenía que hacer de los otros dos sistemas un hábito. Aunque no los había usado tanto antes, esta vez sería diferente. Por eso necesitaba incrementar el nivel de mi magia todo lo que pudiese en cualquier momento.

Entré a la clase un minuto antes de que empezara y me puse a dormir de nuevo. Tenía que dormir para recuperar mi magia más rápidamente.

Con la voz de Claire a modo de nana, mi conciencia no tardó en abandonarme.

“¡Eh, Zeff!”

Al final de la clase, cuando estaba a punto de irme al baño otra vez, un chico más bien tirando a regordete empezó a hablarme. Poniendo una cara rara, me miró como si estuviera analizándome. Traté de ignorarlo pero aparecieron otros chicos bloqueando mi camino.

‘¡¿Qué diablos les pasa?!’

“Eh, Zeff, ¿por qué vas todo el rato al baño?”

“¿Por qué lo preguntas? ¿Tienes que ir?”

“¿Eh?”

En respuesta a mi pregunta, los chicos pusieron una cara complicada y empezaron a reír.

“Puajajajaja.”

Como una ola en el agua, pronto todos los estudiantes se estaban riendo.

“Erm...”

‘Un momento, ¿se están riendo de mí? Supongo que es porque son unos críos.’

Uno se rascaba la cabeza haciendo sonidos extraños, y los demás que había a mi alrededor empezaron a insultarme al unísono.

‘Vaya, creo que estos chavales necesitan un poco de disciplina.’

Señalé a su líder, creando una bola roja. La disparé a un lado de su cabeza, y se consumió antes de llegar a la pared.

‘Hmm... Así que solo vuela hasta esa distancia ahora, ¿eh?’

Aun así, fue suficiente para hacer que el chico se meara de miedo. Tanto que hasta cayó al suelo. El olor de su orina y el fuego consumido empezaron a esparcirse por la clase. Le lancé una mirada asesina al chico por un instante.

“No me gustan estas cosas, ¿sabes?”

Sonreí mientras lo decía, y el chico se desmayó. Al darme la vuelta, di un paso adelante y todos los otros se apartaron de mi camino, bramando. Me dirigí al baño con las manos en los bolsillos. No había gente así en mi otra vida, o puede que yo fuera demasiado inocente si me los encontré.

Cuando abrí la puerta del baño, sonó la primera campana.

‘Mierda, he desperdiciado un descanso que podría haber pasado entrenando.’

Después de las clases...

Mientras todos estaban andando de vuelta a casa, yo tomé el camino opuesto. Mi destino eran los suburbios. ¿Por qué? Bueno, porque podría cazar monstruos por allí.

Conjuré una bola verde en mi mano mientras caminaba, y sentí el poder del sistema verde incrementando en mí. Lo había subido de nivel.

Podía practicar con magia como esa disparando en algún área vacía si quería, pero el uso de la magia en el combate real sería mucho más eficiente. El tiro al blanco era una forma de cultivarla, pero tasación mágica mostraba la diferencia de crecimiento entre los blancos y una ligera lucha real.

La ciudad de Nanami estaba rodeada por un muro, pero había varios accesos en él, custodiados por guardianes. Podría salir sin ningún tipo de problemas a través de las puertas, y dirigirme hacia el desierto. Me llevaría un palo de madera por si acaso.

Caminando un poco, pude ver aparecer monstruos azules como gelatina ante mí. Ese tipo, que pareció brotar sin más de la tierra, era un demonio perteneciente al elemento azul, un bleuciel. (NT: “Azul cielo” en francés.) La tierra estaba llena de magia, y este demonio se creaba a partir del agua de la lluvia empapada en ella. La ciudad había sido protegida mediante patrones mágicos, los demonios no se generaban allí, pero afuera atacaban al primero que se cruzase con ellos.

Con mi palo de madera en la mano, conjuré una bola verde y se la estampé. *BOING* El impacto hizo que el bleuciel se tambalease por el suelo, pero... ¡Todavía estaba vivo! ¡Y estaba extendiendo sus tentáculos hacia mí!

“¡Mierda!”

Paré sus tentáculos con el palo, y conjuré una bola verde de nuevo. Lo aporreé mientras le lanzaba la bola verde, el bleuciel acabó desapareciendo después de unos 10 disparos. Me decidí a utilizar todo el tiempo del que disponía hoy para entrenar mi magia. Después de derrotar al monstruo, pude sentir una fuerza crecer en mi cuerpo. Era la experiencia que, si se elevaba hasta cierto punto, permitía obtener un nivel.

Mientras se sentía el aumento de la fuerza, me tomé un pequeño descanso para recuperar mi poder mágico.

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