Ay, ay, ay... Ya me he quedado sin traducciones en la manga y me van saliendo otras cosas que hacer. Intentaré mantener la constancia todo lo que pueda pero no prometo nada.

-Xeniaxen

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Novela original en japonés por: 金斬児狐 (Kanekiru Kogitsune)

Re:Monster

Traducción: Xeniaxen

Día 480

Un día más avanzando con el golemkrad. Continué siguiendo la corriente de aire, fui atacado por monstruos y me los comí. Es lo que he estado haciendo durante los últimos días.

He recorrido un largo camino desde la plataforma de piedra donde me desperté, y aunque el color del suelo ha ido cambiando, así como los tipos y la fuerza de los monstruos, el hecho es que estoy atrapado bajo tierra. Seguiré intentando salir, pero no sé cuánto más estaré así y empiezo a considerar la posibilidad de que la fatiga mental que he acumulado sin saberlo pueda tener un impacto negativo en mi futuro.

Para cambiar de ritmo, me dirigí a un lugar que encontré usando [Detección de Minerales], [Detección de Metales], [Montañista], [Brújula] y [Detección de Ultrasonidos], que parecía tener una enorme cantidad de minerales concentrados. Tuve que descender un poco, pero después de matar a unos cuantos monstruos, superar un par de acantilados, derrotar a un topo dragón de tierra que habitaba en la cavidad y atravesar una gruesa pared, llegué a un lugar que parecía como un joyero natural. Iluminé el espacio con [Luz] en una [Lanza Drenante de Sangre]. Había una variedad de minerales infinita. Oro, plata, cobre, junto con gemas rojas, azules, amarillas... Las vistas eran hermosas. ¿Cómo habían podido reunirse en un solo lugar una variedad tan amplia de menas y minerales? Parecía cosa del destino.

Con el brazo taladrador de un golem minero, extraje una gran cantidad de minerales en un abrir y cerrar de ojos. Los ordené en un golem transportador, que básicamente es una caja con varias patas, e hice que un golem clasificador los tasara.

Automatizar el trabajo de minería con los golems fue muy satisfactorio. Para ser honesto, sentía como si estuviera destruyendo un tesoro natural. Una parte de mí quería conservar ese bello lugar en su estado original. Incluso pensé que lo que estaba haciendo era un atentado contra la naturaleza. Pero con la enorme cantidad de dinero que podían valer todas esas joyas, ¿cómo no iba a llevármelas? Claro que sí. Cualquiera lo habría hecho. Yo no era distinto.

Continué minando en silencio, intentando exculparme mentalmente. Después de todo, estar solo da mucho en qué pensar. Crees que estás mentalmente exhausto hasta el punto de no poder dejar de pensar en ello.

Me pregunto cuánto tiempo ha pasado desde entonces. Estaba absorto, de vez en cuando comía algún metal para adquirir poderes mágicos y habilidades especiales, cuando de repente volví a la realidad. El brazo con el que estaba taladrando chocó con algo más duro en la pared. Entonces vi la cantidad de trabajo que había estado haciendo, extrayendo innumerables trozos de menas y minerales, y ordenándolos con la ayuda de los golems. Me di cuenta de la fatiga de mi cuerpo, de la que no había sido consciente. Me sequé el sudor de la frente y me di cuenta de mi hambre.

Extendí la mano para comer uno de los minerales que había extraído, cuando vi una piedra preciosa que parecía tener una doncella blanca y pura encerrada en ella. Me dejó hechizado.

Era una piedra enorme, del tamaño de la cabeza de un niño, con un resplandor cautivador. Era pesada, y podía sentir el denso poder mágico que contenía con solo tocarla. Aunque no dejaba de ser una piedra, sentí como si tuviera una fragancia rica y misteriosa, como una fruta celestial.

Incluso sin conocerla, me di cuenta de que era una piedra preciosa muy valiosa. Pensé en conservarla, pero mi apetito se apoderó de mí.

No obstante, mi arrepentimiento desapareció en el momento en que me la puse en la boca.

Era dura por fuera, pero al abrirla, el sabor que se extendió de inmediato fue ligero y dulce, pero no demasiado. Era como el amor de madre. Además, con solo un bocado, la fatiga de mi cuerpo y mi mente se desvanecieron. El aroma que me había llenado la boca llegó a mi cavidad nasal, y el estímulo que percibí con el sentido del olfato creó un paraíso en mi cerebro. Vi el cielo como si estuviera hasta arriba de drogas duras. Se condensó en mí un poder mágico de la mayor calidad que había sentido, llenando mi cuerpo salvajemente con una sensación de júbilo. Sentí como si se me hubieran fortalecido varias funciones.

Habilidad [Brillo Puro e Inmaculado – Diamante] aprendida
Habilidad [Tesoro de la Emperatriz Suprema – Dianne Puritan] aprendida
Habilidad [Mena de Gema Mágica] aprendida
Habilidad [Almacenar Poder Mágico] aprendida

Me dio esas habilidades, y no me sorprendió en lo más mínimo. Después de haber comido tantas menas, estaba convencido de que algo tenía que aprender.

Saboreé el regusto que me había dejado la piedra preciosa, todavía en un estado de ensueño, y se me ocurrió buscar algún otro mineral mineral parecido. Por ahora, me apañaré con lo que tengo y comeré menas comunes. Atrapado bajo tierra como estoy, no está tan mal, ¿no?

Día 481

Hoy quería volver a minar en busca de minerales deliciosos.

Me quité la armadura ligera de cuero, sucia y sudada, y en su lugar me puse un uniforme de trabajo simple pero resistente hecho con la tela mágica y cuero suave. Luego me puse un casco de seguridad y pasé el resto del día minando en silencio usando uno de mis brazos plateados de taladro.

Por mi experiencia anterior, tenía una vaga idea de dónde y cómo excavar para que fuera más fácil. Al igual que apuntar al punto vital de tu presa, si cavas en un punto que parece frágil, puedes recolectar una gran cantidad de menas y minerales. Es un trabajo sencillo, pero muy divertido. Sentí como si el estrés que se había estado acumulando sin que me diera cuenta se liberaba gradualmente. Además, cuando estaba minando, tenía la sensación de que alguien más lo hacía. ¿Podría ser esto parte de un recuerdo perdido? Continué trabajando, con la esperanza de poder recordar al menos un poco mientras lo hacía.

Tenía mucho en qué pensar, pero no podía dejar que mi mente divagara mientras extraía. Había muchos tipos de menas y minerales, incluidas esas gemas mágicas exclusivas de este mundo que me comí. Hay gemas mágicas que pueden explotar si las dañas, o que pueden electrocutarte. Las probabilidades de desenterrar gemas mágicas son bajas, pero incluso si tienes la suerte de encontrar una y la rompes, puedes desencadenar accidentes que llevarían al golem minero más resistente al desguace. Por la tarde, rompí una piedra preciosa de color rojo con la punta plateada de mi brazo taladro y quedé atrapado en una poderosa explosión.

Afortunadamente, no me hice ni un rasguño, ya que la rotación de alta velocidad del taladro disipó la onda expansiva. Además, la ropa de trabajo que llevaba era resistente y, por si acaso, me cubrí con [Película Lubricante], que hizo que los escombros voladores se deslizaran sobre mi cuerpo; [Membrana Mucosa Regenerativa], que me curaba si me lesionaba, y [Grasa Amortiguadora], por lo que salí ileso. Más vale prevenir que curar. Suerte que explotó y no soltó un gas tóxico.

No quiero que me entierren vivo cuando la mina se derrumbe ni tener que salir a rastras, así que debo tener cuidado con mi seguridad mientras intento ser eficiente.

Recogí algunos minerales deliciosos más y tracé un plan aproximado de lo que haría con ellos. No tengo la intención de seguir minando aquí para siempre. Sin embargo, los minerales de aquí definitivamente me serán de utilidad en el futuro.

Las habilidades que pude aprender con solo un poco de práctica fueron excelentes. Y es posible que escondan habilidades más interesantes. Además, hay muchas características que son exclusivas de este mundo que aprendí al comer menas y minerales. Creo que con las técnicas de herrería que recuerdo, podría fortalecerlas o incluso mejorarlas. Podría fabricar algunos artículos excelentes. No tengo todas las herramientas, conocimientos y habilidades ahora mismo, pero debería poder recolectarlos para más adelante.

Por ahora, uso el botín o bien para fabricar herramientas, o bien me lo como y aprendo habilidades, o bien lo guardo para intercambiarlo cuando lo necesite. Lo clasifico en estas tres categorías.

Realmente no guardo muchas para comer, sino que las voy consumiendo mientras trabajo. Algunas no me dan nada enseguida, pero a base de cantidad sí que aprendo nuevas habilidades.

Cuando he acumulado unas cuantas, me las como y cambio de sitio. Y si no, también voy cambiando de vez en cuando para obtener variedad.

Me he puesto como fecha límite pasado mañana. Haré todo lo posible para obtener la mayor cantidad de resultados dentro de este tiempo. Aun así, trabajar me da sed. Lo primero que voy a hacer cuando llegue a la superficie es encontrar un buen sake.

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