06/09/2016

WCC - 83, 84


Con estos capítulos ya sí que cerremos el tomo 4 de la novela, y por consiguiente tenemos su PDF:






¡Disfruten de la lectura y hasta la semana que viene!


-Xeniaxen



Novela original en japonés por: ヘロー天気 (Hero Tennki)
World Customize Creator


Traducido al español por: Degel
Revisado por: AMarauder y Xeniaxen



Capítulo 83: El despertar de la oscuridad y la luz (II)

Yuusuke empezó a trabajar en la personalización del pavimento de la carretera en lo que se acercaba al sitio del enfrentamiento. Como siempre, todo se envolvió en luces parpadeantes. Logró llenar seiscientos metros de la carretera con trampas de una sola vez.

Al llegar a lo que pronto iba a ser el campo de batalla, Yuusuke repitió la misma personalización en el camino detrás de él. También añadió un pequeño camino para conectar ambas zonas. Con eso, personalizó alrededor de dos kilómetros de la carretera.

"Uf, de alguna forma me las arreglé para lograrlo a tiempo. Te dejo el resto a ti."

"Entendido. Voy a tomar el relevo desde aquí."
Colocó postes para marcar el comienzo y el final de la zona personalizada en el este, y ordenó a un grupo de señuelo —un pequeño grupo formado por veinticuatro soldados, especializados en cualquier arte divina ofensiva de larga distancia, artes de tipo movimiento y artes aéreas de tipo comunicación— para que tomasen sus posiciones. Dirigidos por Vermeer, su misión era provocar al enemigo atacando con las artes divinas y luego retirarse con la ayuda de los trucos de movimiento.
Cuando Vermeer terminó su despliegue, Yuusuke se dirigió hacia el lado opuesto y tomó el control del escuadrón occidental. Colocó a las tropas en el frente de la zona personalizada de 800 metros, terminando así los preparativos de batalla.
La formación de batalla era la siguiente: zona occidental de trampas personalizada – Escuadrón de Investigación del Cuerpo Oscuro – Yuusuke – zona oriental de trampas personalizada – escuadrón señuelo.
"Parece que tienen la intención de pelear" dijo alguien observando los preparativos de batalla desde las sombras en el bosque.
• • •
Varios mercenarios estaban marchando en pelotones compuestos de quince personas. Con veinte de estos pelotones, su total ascendía a cuatrocientos soldados. Además, tenían ochenta soldados de élite de Benefost, así como los mercenarios. El Cuerpo Oscuro estaba utilizando artes aéreas para explorar los alrededores, de modo que controlaba plenamente los enemigos que entraban.
"No podemos contactar con los soldados de bestias malignas. Esto...”
"No parece haber ningún rastro de obstrucción del aura de artes divinas."
"Probablemente fueron aniquilados o forzados a retirarse. En cualquier caso, han cumplido con su deber y Benefost valora eso."

Cuando estaba a punto de indicarlo, el pelotón de mercenarios adelantado advirtió al batallón enemigo por delante de ellos.
"¡Enemigo al frente! Hay alrededor de veinte... ¡Nos están atacando!”
"Hmm... ¿Están tratando de desafiarnos con un solo pelotón estando fuera del rango de sus artes divinas?"
Se preguntaba si el pequeño pelotón había puesto en marcha un ataque preventivo después de entrar en pánico por la diferencia en el tamaño, o si todo era parte de algún tipo de plan de batalla. El pequeño pelotón comenzó a retirarse después de disparar sus ataques. El batallón estaba centrado en los combatientes cuerpo a cuerpo y no tenían a nadie que controlase las bestias malignas. Seguir avanzando al ritmo actual provocaría pérdidas innecesarias, por lo que el comandante cambió la formación para reforzar la vanguardia con mercenarios armados con artes defensivas, quienes tenían la orden de avanzar a un ritmo más enérgico. Sin embargo, el pelotón había aumentado su velocidad, comparado con la velocidad de Viento Afilado.
"¿Van a retirarse? Rompieron la formación pero no parece que estén huyendo..."
También era posible que la otra parte supiera que sus ataques de artes divinas de larga distancia apenas tenían rango para hacer daño. Si fueran a retirarse, mientras que coincidían con el ritmo de su ejército, el pequeño escuadrón solo se cansaría y no le causaría ningún daño a las fuerzas de Benefost.
"¿Están planeado atraernos a alguna parte?"
"Escuchamos que el Cuerpo Oscuro cuentan con unos setenta soldados. ¿Puede ser que estén tratando de atraernos a su fuerza principal?"
Incluso si el Cuerpo Oscuro planeaba atacarlos, no podían atacar descuidadamente a un pelotón de este tamaño. Tomando en consideración las artes divinas de rápida construcción del comandante enemigo, Benefost ordenó de mala gana a su ejército que atacase.
"TODO EL MUNDO, ¡COMIENCEN EL ASALTO! ¡NO VACILEN AUNQUE VEAN UNA TORRE O UNA FORTALEZA APARECER FRENTE A USTEDES!"
Benefost sabía de las hazañas de Yuusuke en Sanc Adiet, Blue Garden y el área experimental para la investigación de las bestias malignas, así que cuando ordenó atacar esperaba que algo así de inusual sucediera.
"Incluso si crearan algo de ese calibre aquí, si cargamos totalmente contra ellos, no van a ser capaces de encerrarse a sí mismos dentro."
Sería un asombroso golpe para el comandante enemigo que el pelotón cayera en retirada. Luego Benefost rodearía las fuerzas restantes del Cuerpo Oscuro y los aplastaría lentamente.
Con un fuerte rugido, los mercenarios empezaron a atacar después de la retirada del famoso y distinguido grupo enemigo, persiguiéndolos como si trataran de tragarlos por completo... sin embargo, unos momentos después su objetivo fue envuelto repentinamente por perlas de luz y desaparecieron.
"¿Qué pasó?"
"¿Han desaparecido?"
"¡No! ¡Por ahí!"
"¿Cuándo? ¿Por qué ahora?"
Las vanguardias mercenarias solo podían gritar confundidos. En realidad, el pelotón que estaba justo enfrente de ellos se había adelantado de repente. Luego se dividió en dos grupos y asumió posiciones de batalla. En ese momento, alguien vio a una persona más...
"¡Es el héroe de Fonkrank!"
"¡El capitán del Cuerpo Oscuro está aquí!"
• • •
Siguiendo el plan, modificó el mapa para mover al pelotón de Vermeer a un lugar seguro. Después, Yuusuke atacó a la vanguardia mercenaria causando temblores subterráneos.
El único propósito del pelotón era atraer a Viento Afilado a la parte modificada de la carretera. Su estrategia consistió en caminar por el bosque y luego dejarse ver por su enemigo. Después, Vermeer se retiró mientras le hacía creer al enemigo que pronto alcanzaría al pequeño pelotón.
"Eso fue realmente aterrador" suspiró Vermeer mirando a los agotados mercenarios, que estaban repartidos por toda la carretera. Su propio equipo, ahora parado detrás de Yuusuke, también estaba jadeando, agotado después de correr.
Sin embargo, sus esfuerzos no fueron en vano: la mayor parte de las fuerzas enemigas ahora estaba dentro de la zona personalizada y Yuusuke fue rápido en el trabajo, manipulando el menú de personalización con el dedo.
"¡Ejecutar!"
• • •
Ver al comandante enemigo y al Héroe de Fonkrank delante de ellos elevó la sed de sangre de los mercenarios al máximo; asesinarlo haría que su nombre hiciera eco por todo Kaltcio.
Sin embargo, la extraña arte que había estado preparando señalándolos con el dedo también había inculcado una especie de cautela en algunos de los mercenarios. Al final, hicieron caso omiso de sus dudas —después de todo, ¿qué podría hacerles una fuerza tan pequeña a ellos?— y arremetieron contra ellos, sacando las armas.
"¡No se precipiten, ahora debemos estar en el rango de sus paredes!"
"¡Todo el mundo, retirada!"
Los soldados de élite habían alcanzado a los mercenarios y de alguna manera habían logrado calmarlos. Inmediatamente después de eso, el camino comenzó a brillar a su alrededor donde esperaban que apareciera una pared. Sin embargo, una vez que los destellos se desvanecieron, los mercenarios habían desaparecido también.
"¡Vaya!"
"¡¿Qué fue eso?! ¡¿Qué pasó?!"
"¿Una pared? No... un agujero."
"¡¿C-Cuando cayeron en el agujero?!"
Un profundo agujero de 2 metros, o más bien una zanja, había aparecido ante los mercenarios, atrapándolos apretados en su interior. Sin embargo, incluso si el héroe había preparado una trampa de antemano, era imposible inhabilitar completamente a un ejército tan grande con solo una trampa.
Sin embargo, ambos lados de la carretera se pusieron a brillar una vez más y aparecieron paredes a ambos lados de la zanja. Entonces las paredes cayeron, encerrando a los mercenarios en una enorme prisión bajo tierra.
"Esto es..."
"¡C-Comandante! Los mercenarios..."
"No entren en pánico, todavía somos mucho más numerosos. Dividamos nuestras fuerzas en escuadrones de ataque y rescate."
De repente, una indistinguible aura de artes divinas se extendió por toda la zona. El jefe mercenario miró instintivamente hacia el capitán del Cuerpo Oscuro, y vio al pequeño pelotón que los atrajo aquí.
De inmediato entendió que había caído en la trampa. Las perlas de luz desaparecieron y pronto se hizo el silencio en la carretera. Los gritos de las aves en el bosque y el sonido del aleteo de un manto negro en el viento eran los únicos sonidos que permanecían en la carretera ahora vacía.
"¡...!"
"Imposible..."
Parecía como si no hubiera pasado nada. Los mercenarios y sus prisiones no podían verse por en ninguna parte. El sonido metálico de las armaduras chocando entre sí y las armas golpeando se había ido por completo.
• • •
Uf... fue más fácil de lo esperado.
El plan de Yuusuke de modificar mapa a gran escala había tenido un éxito espectacular —el oponente estaba completamente atrapado y sin poder.
Para atraer al enemigo a la zona oriental personalizada, levantó varias paredes, dejando el área de trampa como una lucrativa ruta de escape. Entonces, él personalizó trampas que parecían canales de riego. Después de encerrar al enemigo dentro de una larga trampa de seiscientos metros, se volvió hacia la zona occidental.
En el caso de que los mercenarios lograran escapar de la trampa, Yuusuke dejó la mitad de sus fuerzas patrullando la zona oriental. Era poco probable que la zanja cediera por sí misma, ya que las paredes que la rodeaban estaban fortificadas por la personalización y se necesitaría un considerable esfuerzo para romperlas.
Al principio, Yuusuke planeaba crear una pequeña fortaleza en la carretera y atraer al enemigo allí con la mejora de movimiento personalizada, sin embargo no hubo tiempo suficiente para prepararlo todo, así que tuvo que delegar en el grupo de Vermeer para atraer a Viento Afilado.
Mirando atrás por encima del hombro, Yuusuke inclinó la cabeza a Vermeer, agradeciendo a sus compañeros por darlo todo en ese loco plan, y se volvió para enfrentarse a las fuerzas restantes de Viento Afilado.
Al otro lado de la carretera ahora vacía, ahora se podía distinguir claramente la figura que daba órdenes a las fuerzas enemigas restantes.
Ella llevaba una impresionante armadura, que acentuaba las curvas de su cuerpo y su busto voluptuoso. Un característico pelo verde le caía libremente por la espalda. Era probablemente la oficial militar Benefost de la que Valerie había estado hablando.
"Llama al grupo de Valerie."
"Entendido. ¡Transmisión oficial!"
• • •
Yuusuke pidió que llamaran a Valerie al frente, con la esperanza de negociar con Benefost. Mientras tanto, los soldados restantes en el lado del Benefost se habían puesto pálidos después de presenciar que trescientos de sus compañeros habían sido enterrados vivos y se enfrentaron a las élites de Viento Afilado.
"¡Era demasiado imprudente desafiar al Cuerpo Oscuro! No voy a pelear más."
"Espera, ¿no es un incumplimiento del contrato?"
"¡Nuestro contrato no decía nada sobre tener que luchar contra un monstruo!"
"Debieron informarnos desde el principio sus intenciones de luchar contra el Cuerpo Oscuro."
Los soldados tenían miedo y no podían pensar en otra cosa que huir. Benefost lo comprendía completamente, pero no tenía ningún lugar adonde retirarse. Ella miró enojada a la persona de cabello negro, enmarcado por un manto negro, parado muy por delante de ella.
Su corazón de guerrera latió aún más rápido. "Quiero pelear contra él" murmuró, incapaz de contener la excitación que ardía en su interior.





Capítulo 84: El despertar de la oscuridad y la luz (III)

Las fuerzas de Hivodir se habían unido con el ejército de liberación de Trent Rietta y estaban luchando para recuperar Rinwaal. Viento Afilado era un caos después de perder el apoyo de los controladores de bestias malignas. Con la milicia atacando desde la retaguardia, finalmente lograron romper la puerta de Rinwaal.

El ejército atacante entró a la ciudad y se fusionó con el ejército de liberación. El impulso instó a las partes neutrales a apoyar el lado de Cliffzah y, con un nuevo aumento en sus fuerzas, el ejército rodeó el palacio de Rinwaal. Era evidente que la recuperación del palacio sería solo cuestión de tiempo.

"¿Dónde están los refuerzos del oficial militar?"

"Los hemos llamado, pero la turba ha ganado el control completo de la puerta occidental así que les tomará algún tiempo llegar al palacio."
Aparte de eso, había rumores de que el cuerpo principal del ejército de Benefost había caído en la trampa del Cuerpo Oscuro, siendo completamente aniquilado. Esto reducía aún más la posibilidad de recibir refuerzos —la situación era desesperada.
"Eh... ¿Por qué no vas a enfriarte la cabeza un poco?"
"Fufufu. No me lo esperaba. Mira aquellas personas que creías perezosas e indiferentes. Qué diferentes se ven ahora, ¿no?"
Fortress estaba en una terraza con vistas a la ciudad. Extendió sus manos hacia el pueblo de abajo, donde sus soldados se estaban enfrentando con los plebeyos usuarios de artes divinas. Si esta lucha seguía, este país se convertiría exactamente en lo que el conde Elfdras había previsto.
"¡Hermoso! ¡Es tan hermoso! Hemos hecho lo que el conde había anhelado tanto. Hemos despertado el espíritu de lucha del país."
"Pero no podemos controlarlo, no crearíamos un imperio ni en sueños... ¿Qué pasa con nuestra gloria prometida?"
"¿Imperio? ¿Gloria? No eran más que la guinda del pastel. Nuestra principal misión era despertar a la nación."
"..."
Fortress estaba extasiado y lo expresó como si fuera un logro, esquivando sin esfuerzo una cuchilla de viento que alguien del terreno le había lanzado. Airzah dudaba de que él estuviera en su sano juicio después de haber sido conducido a esa situación. Por lo general, Fortress era un hombre de pocas emociones, los otros tenían que estar constantemente tratando de adivinar sus verdaderas intenciones.
"De todas formas, parece que hemos perdido el palacio. Escaparé de aquí."
"Jajajaja...”
Fortress rió, observando las calles, llenas de gente.
Se le ha ido por completo...
Airzah sacudió la cabeza y salió rápidamente del cuartel general.
• • •
Carretera occidental, batalla entre el Cuerpo Oscuro y Viento Afilado
El ejército de Viento Afilado apenas había escapado de la aniquilación por la surrealista arte divina que había hecho que la tierra tragase una gran parte de sus fuerzas. La escuadra de Benefost avanzaba lentamente hacia el solitario capitán del cuerpo, parado en medio de la carretera.
Las fuerzas restantes de Viento Afilado consistían en los ochenta guardias de élite de Benefost y sesenta mercenarios restantes que habían unido sus fuerzas por dinero y fama.
Solo por los números, eran más fuertes, sin embargo, no podían atacar a la ligera. Al acercarse demasiado al capitán enemigo, sus compañeros fueron tragados por la tierra. A pesar de eso, los soldados restantes no tenían ningún lugar a donde regresar. Por unos instantes se limitaron a quedarse de pie mirando a Yuusuke.
Sabían que lo que había ocurrido antes había sido causado por el hombre frente a ellos. Su fuerza principal, los controladores de bestias malignas, se encontraban indefensos desde la batalla de Rinwaal, la superioridad de los usuarios de artes terrestres de Fonkrank era clara, pues capaces de reproducir sus flautas en un lapso de tiempo muy corto. Ni uno solo de ellos se dio cuenta de que todo había sido realizado por una sola persona.
Dado que el Cuerpo Oscuro fue capaz de preparar una trampa en medio de la carretera, donde la visibilidad era buena, los mercenarios creían que rodearlos por el bosque sería aún más peligroso —ni uno de ellos se atrevía a pensar en tal acercamiento.
"Comandante, ¿no deberíamos retirarnos?"
"No vamos a hacer eso..."
"¡P-Pero...!"
"¡NO!"
Benefost tenía la mirada fija en el hombre vestido de negro delante de ella. Estaba analizando su entorno, tratando de entender si podía lanzar reiteradamente tal arte divina. Solo estaba segura de que, como mínimo, él podía enterrar a trescientas personas en el medio de la carretera. Y, siendo así, desde luego tendría otros trucos bajo la manga.
¿Era el capitán de verdad una amenaza que podía enfrentarse a solas contra todo un ejército enemigo, o solo estaba ganando tiempo? Si era solo una táctica, entonces con cada segundo que sus aliados consiguiesen, estarían más cerca de lograr su objetivo. Incluso teniendo en cuenta el pequeño pelotón detrás del solitario hombre, Viento Afilado era todavía casi cinco veces más fuerte.
¿Qué posibilidades tenemos si lo atacamos...?
Mientras Benefost consideraba la posibilidad de dar la orden de atacar, Yuusuke de repente balanceó su brazo hacia adelante. Los soldados de Viento Afilado se tensaron, pero antes de que pudieran darse cuenta, había tres personas con ropa de viajero y un joven desvalido de pie al lado del capitán del Cuerpo Oscuro.
"¿Esa es... Valerie?"
• • •
Yuusuke los trajo delante de él modificando el mapa e hizo un gesto hacia las fuerzas de Viento Afilado, para que confirmaran que Benefost estaba entre los soldados, y así poder convencerla de que se rindiera.
Valerie se quedó estupefacta por la repentina arte divina de teletransporte, pero de alguna manera logró asentir en confirmación.
"Lifon, confío en ti para las artes aéreas."
"Sí~"
Su voz, ahora reforzada por las artes aereas de Lifon, resonó por toda la carretera, ordenando a Benefost que se rindiera. El rango de Lifon era ligeramente más pequeño del que un usuario especializado en artes de comunicación podía lograr, sin embargo, Valerie optó por escuchar la sugerencia de Welsh y confiar en alguien de su propio grupo en lugar de pedirle ayuda a Yuusuke.
No mucho más tarde, la respuesta de Benefost resonó desde el otro lado.
"Perdone mi insolencia, mi señora, pero no puedo rendirme llegados a este punto."
Actualmente sus fuerzas estaban comprometidas con el ejército de liberación de Cliffzah, y respaldadas por los aliados de Yuusuke de Fonkrank. La sublevación ya había comenzado, no había forma de que ella fuera a traicionar a sus aliados basándose en una fugaz petición.
La respuesta de Benefost sonaba demasiado irreal para ser verdad (como el suicidio de un amante), y agitó a Valerie lo suficiente para que fuera a buscar apoyo en sus compañeros.
"Bene, escucha, me uní al Cuerpo Oscuro por voluntad propia. No sé lo que sucedió antes, pero te prometo que no vas a salir lastimada."
Valerie explicó que habían estado bajo la protección del Cuerpo Oscuro durante su viaje, y las noticias sobre el motín les habían llegado mientras estaban en la ciudad portuaria.
"¿...Entonces usted no es una prisionera, mi señora?"
"No. Odo me contó que el oficial general y el tesorero oficial... estaban tratando de asesinarme."
Siguieron hablando de esa manera por un rato. Algunos de los soldados, miembros de Viento Afilado, se agitaron visiblemente. Esta historia era muy diferente a lo que había oído Benefost del oficial general y el tesorero oficial.
"Así que eso es lo que sucede... Voy a tener que castigarlos más tarde. Pero todavía no puedo rendirme."
"¡¿POR QUÉ?!"
"Ya se lo he dicho. Hemos puesto en marcha algunas cosas que son imposibles de detener."
Viento Afilado seguía luchando incluso mientras hablaban. Bajar sus armas ahora solo porque las circunstancias habían cambiado sería escupir en las caras de los que continuaban luchando y los que ya habían caído. Eso es lo que quería decir Benefost.
"¡Hay quienes han muerto aquí! ¿Desea que pasen a la historia como pérdidas en vano?"
Benefost afirmó su determinación mientras preparaba su arma.
• • •
Parecía que el diálogo había fallado, por lo que Vermeer y el resto se reunieron alrededor de Yuusuke.
"¿Debo ordenar al pelotón que venga aquí?"
"Sí, parece que esta batalla es inevitable."
Todavía había más de un centenar de soldados restantes en el lado opuesto, y eran las élites de Viento Afilado. Yuusuke seguía tratando desesperadamente de encontrar una manera de evitar pelear contra ellos, pero parecía poco probable que hubiera palabras capaces de influir en Benefost.
"Hemos conseguido crear un poco de discordia entre ellos, por lo que igual podríamos obligar a Benefost a resolver este conflicto con un duelo, pero..."
“¿... Podemos confiar en que así lo haga si acepta?"
Después de todo, se trataba de una persona que no se daba por vencida, ni siquiera después de haber perdido a gran parte de su ejército por las trampas. Sus tropas no estaban muertas, simplemente estaban atrapadas. Si la batalla se prolongaba durante bastante tiempo, cabía la posibilidad de que volvieran a unirse a las tropas principales.
La prisión hecha de tierra personalizada se podía romper con los debidos ataques de los prisioneros. Los mercenarios también parecían comprender las intenciones de Yuusuke, por lo que se movieron a la retaguardia y lanzaron artes defensivas sobre sí mismos. Yuusuke sabía que tenía que finalizarlo ahora, mientras la moral del enemigo siguiera estando baja.
"Voy a terminar la batalla tan rápido como pueda" dijo, volviéndose hacia la preocupada Valerie. Benefost era como una hermana mayor para ella. La chica tenía escrito en la cara: Déjala con vida, por favor.
A Yuusuke no le gustaban las batallas sangrientas, por lo que siempre que fuera posible trataba de encontrar una solución pacífica para el conflicto. Había entendido la personalidad de Benefost y su dedicación hacia sus soldados, y lo consideró cuando preparó su ataque.
"Lifon, ¿puedes comunicarme con ella?"
"Ah, sí."
Yuusuke decidió probar algo para hacer que el enemigo vacilara. Su plan era decirle que los soldados desaparecidos estaban vivos y encerrados en un lugar distante por su arte divina, sin embargo, si seguían atacando ya no se contendría más.
"Si quieren luchar, prepárense para morir."
Yuusuke los observó, esperando que su sed de sangre se apagase después de saber que sus amigos estaban vivos y perdieran su razón de arriesgar la vida en esta batalla. Sin embargo...
"¡Capitán, capitán, diciéndoles eso solo tendrá el efecto contrario!"
Vermeer intervino, ya que sus enemigos eran mercenarios que no se dejarían llevar por esas palabras. Mientras tanto, Benefost respondió al farol de Yuusuke.
"Es un honor para mí pelear con el famoso héroe de Fonkrank."
"¿...Eh?"
"Ah, eres bastante lento."
Pediré consejo a alguien la próxima vez.
• • •
Como dijo Vermeer, el discurso de Yuusuke no tuvo ningún efecto sobre los mercenarios y las fuerzas de Benefost siguieron su despliegue como si nada. Los mercenarios se unieron a sus órdenes, y se fusionaron con las fuerzas personales de Benefost.
En total, las fuerzas restantes eran de alrededor de noventa soldados.
Al ver que no había nada que pudiera hacer, Yuusuke abrió su menú de personalización mientras les decía al pelotón de Vermeer y a Valerie que lo dejaran solo. No tenía intención de perder, pero quería que todos ellos estuvieran preparados para escapar usando la modificación del mapa en caso de que algo saliera mal.
Asombrosamente para él, Yuusuke se quedó completamente tranquilo. Cuando utilizó por primera vez sus poderes en la batalla, ni siquiera veía su entorno por la tensión, la agitación y la ira que irrumpieron en su corazón. Sin embargo, con el tiempo experimentó muchas cosas que le hicieron darse cuenta de lo horrible que era su estilo de lucha, y con eso se dio cuenta de que quería cambiar. Tal vez su primer beso con Sun también tuvo un efecto sobre eso.
Sonriendo con amargura, se deshizo de los pensamientos innecesarios, dirigiendo toda su atención hacia el menú de personalización, y se movió hacia el enemigo.
• • •
El capitán del Cuerpo Oscuro caminaba lentamente hacia el ejército de Viento Afilado, y de repente sorprendió a todos cuando se teletransportó en un instante a la mitad de la distancia.
Lo había hecho ya dos veces, y sus tropas todavía estaban intimidadas por sus acciones, pero Benefost ya había aceptado que era su arte divina y no se sentía amenazada por ello.
"Oficial militar de Viento Afilado Benefost, ¡te desafío a un duelo!"
En silencio, Benefost agarró su lanza larga favorita y la levantó sobre su cabeza. Disparó una cuchilla de viento hacia Yuusuke utilizando un bardiche como arma. (NT: arma mezcla de hacha y arma enastada, la cual se caracteriza por tener una hoja similar a la de un hacha de guerra que, en lugar de estar enastada al final de la vara, está unida a esta por dos puntos, dejando el suficiente espacio para cogerla por detrás de la hoja a modo de mango.) Ella podía controlar el tamaño de las cuchillas, cosa que la hacía extremadamente versátil en el cuerpo a cuerpo.
Si hubiera que evaluar su habilidad, estaría cerca de la lanza de llamas que Krielov ejercía como comandante del Cuerpo Divino del Fuego.
Las élites de Viento Afilado se movieron hacia el borde de la carretera para escapar en caso de que el camino también decidiera tragarlos. Fue un buen movimiento de seguridad, no obstante, Yuusuke ya estaba ajustando la información de su mapa al tipo ofensivo.
De repente, un pilar de quince metros de altura salió disparado fuera de la tierra, junto con tres golems blindados enterrados en el suelo del torso hacia abajo. La torre se basaba en la torre de vigilancia de Diernuk y los golems blindados se parecían a la versión del golem que utilizó para ganar a Thalys.
La torre era inaccesible por medios normales. Era necesario modificar el mapa para entrar y salir de ella.
"¡¿Este... es el verdadero poder del capitán del cuerpo?!"
Benefost se quedó de piedra por un momento, pero logró recuperarse con la rapidez suficiente como para notar las partículas que brillaban bajo sus pies e inmediatamente saltó fuera de peligro. Ella esperaba que otro agujero apareciera allí, pero en cambio el suelo empezó a dar vueltas.
En el área empezaron a abrirse una gran cantidad de zonas rotatorias, que se veían como algo salido de una pesadilla. Algunos soldados de élite quedaron atrapados en la trampa y cayeron al suelo. Al siguiente instante, los gigantes cogieron con sus manos a los soldados indefensos.
"¡Uagh-!"
"Mantengan las líneas, las líneas traseras no pueden reaccionar lo suficientemente rápido."
"Maldición. ¿Por qué estos golems son tan ágiles?"
Los gigantes atacaron a las élites de Viento Afilado con una velocidad inverosímil para algo tan grande. Diez soldados que por mala suerte habían caído en los remolinos fueron golpeados y lanzados al bosque por los gigantes, algunos de ellos incluso se golpearon con los árboles.
Mientras tanto, Yuusuke estaba observando la aniquilación desde la parte superior de la inaccesible torre de vigilancia, manipulando cuidadosamente varios parámetros para controlar la batalla. Los que habían logrado evitar el ataque del gigante quedaron atrapados en las prisiones de tierra. La estrategia negó a Viento Afilado cualquier posibilidad de reagruparse o montar un contraataque.
"¡Pónganse detrás de los gigantes! ¡Usen sus artes aéreas para derribarlos!"
Benefost pensó que las personas más agiles podrían evitar las áreas que giraban si utilizaban artes aéreas para mejorar el movimiento, y dio las órdenes oportunas a los que todavía seguían luchando.
Después de asistirse a sí mismos, sus soldados de élite lograron superar esas zonas, aunque sus movimientos se veían obstaculizados por la inestable superficie.
Como era de esperar de alguien que vive por la batalla.
Yuusuke, que estaba bastante impresionado con el hecho de que Benefost lograra detectar inmediatamente las partes débiles de sus trampas, respondió ajustando algunos de los parámetros en su pantalla. Sin embargo, las trampas giratorias tenían otro truco —estaban alineadas, lo que le permitía controlar fácilmente las ubicaciones de las mismas.
Algunos de los élites más ágiles lograron llegar a los puntos ciegos de los golems y comenzaron a destruirlos, no obstante, en poco tiempo, en el área alrededor de los gigantes comenzaron a acumularse cuerpos.
Con cada golem, Viento Afilado ganaba algo de terreno, pero toda la zona de 600 x 6 metros era demasiado grande para que ellos sacaran ventaja.
"¡Haaah!"
Aprovechando el momento en que el gigante había golpeado con su puño, Benefost corrió por su brazo y golpeó sus hombros con toda su fuerza. Su larga lanza, reforzada por las artes aéreas, dejó un corte profundo en el cuerpo del gigante, y en poco tiempo su brazo izquierdo se desprendió y cayó al suelo.
El gigante era solo un gran truco que no podía mantener el equilibrio por sí mismo y también se desplomó. Sus aliados estallaron en aplausos, y Yuusuke tuvo que dirigir su atención a los mercenarios, que habían logrado llegar a su torre y estaban buscando una entrada a su base.
El gigante caído también sirvió para elevar la moral de las tropas de élite de Benefost, que incrementaron sus esfuerzos para derribar a las dos golems restantes.
"¡Ejecutar!"
"¡¿Qué...?!"
"¡¡...!!"
Ocho gigantes más surgieron de los pilares de luz. Había demasiados de ellos para un camino de este tipo, pero el objetivo principal de los golems era intimidar a Benefost, mostrándoles la clara diferencia en poder a ella y sus subordinados.
"¡No vacilen! El número de golems está mostrando su impaciencia. ¡Si los eliminamos vamos a ganar la batalla!"
Benefost reunió a sus tropas antes de que se desmoralizaran y saltó hacia uno de los nuevos gigantes antes de que empezara a moverse.
Sin embargo, el daño que le hizo al golem inmóvil fue reparado en un instante. Por una esquina de su visión, ella también vio al gigante que había destruido hace un momento pivotando su brazo hacia ella.
"¡Maldición!"
Benefost estaba suspendida en el aire y no pudo hacer nada para evitar el puño.
"¡Gah!"
"¡Oficial militar!"
No podía respirar. El golpe y la subsiguiente caída habían drenado toda la fuerza de su cuerpo. Así que esta es la forma en que moriré... era lo único en que pensaba, mirando el puño del gigante levantado por encima de su cabeza para dar el golpe final.
Sin embargo, ese puño nunca descendió.
"... El ejército de liberación del Rey Cliffzah ha recuperado el palacio de Rinwaal."
El mensaje se envió en todas las direcciones, a todas las ciudades, pueblos y países vecinos. Inevitablemente, también alcanzó el punto de la carretera donde se estaba librando la batalla.
Después de un momento para procesar la noticia, el Cuerpo Oscuro y Benefost mutuamente acordaron una tregua. Por ello, los mercenarios que habían sido atrapados bajo tierra también fueron liberados, poniendo fin a la batalla en la carretera occidental.
"Oh, vaya, nos las arreglamos para llegar a una solución pacífica, después de todo" suspiró Yuusuke desde lo alto de la torre de vigilancia, y comenzó a limpiar las trampas y los golems del área. Quitó los gigantes, uno por uno, volviendo el suelo a su posición original.
Finalmente el camino fue devuelto a su condición anterior. Los soldados atrapados se dispersaron a toda prisa a las aldeas cercanas y a la ciudad portuaria.
Los demás miembros del Cuerpo Oscuro y los caballeros de Fonkrank confirmaron la situación y comenzaron a desarmar los cincuenta y tantos miembros de Viento Afilado que permanecían en la zona. Las élites de Viento Afilado utilizaron sus artes de mejora de movimiento y se dirigieron hacia el bosque para ayudar a sus compañeros afectados por los golems gigantes. Alrededor de la mitad de ellos había sufrido algún tipo de lesión durante la batalla.
Benefost había sido herida gravemente durante la batalla y tuvo que ser curada, por lo que los ojos de todos, naturalmente, se volvieron hacia Yuusuke cuando se produjeron los problemas más importantes. El llamado héroe estaba a poca distancia del campo de batalla, rodeado de caballeros de Fonkrank, Valerie y sus dos asistentes.
"Yuusuke."
Yuusuke volvió la cabeza hacia Benefost, que estaba detrás de un grupo de miembros de Viento Afilado. Estaba de pie, orgullosa, y llevaba un uniforme informal que no cubría nada más que su ropa de batalla. Avanzó hacia Yuusuke para reconocer su derrota y abogar para salvar la vida de sus tropas.
"Solo estaban siguiendo mis órdenes. Asumo toda la responsabilidad por ellos.”
Diciendo esto, Benefost levantó un cuchillo en su cuello, delante de sus confundidos aliados que apenas podían elevar sus voces sorprendidos.
"¡Comandante!"
"Por favor, espere, Benefost."
"No te acerques más. Los he usado para matar a mucha gente de Trent Rietta. ¡Tengo que pagar por ello!"
Contenida por sus subordinados, Benefost miraba al capitán del Cuerpo Oscuro y a Valerie. Ella se había calmado y estaba totalmente preparada para suicidarse y acabar su propia guerra.
"¡Espera, Bene!"
"Mi señora, me alegra verla."
"¡Ejecutar!"
Yuusuke consiguió teletransportarse a tiempo y agarró el brazo de Benefost antes de que ella lograra hacerse daño. Impresionada por el teletransporte, dudó un poco, lo que permitió a Yuusuke detenerla. La oficial militar solo respondió con una expresión ligeramente perpleja reemplazando la calma que había mostrado antes.
"... Yuusuke, ¿ni siquiera permitirás que muera? ¿No puedo morir como una orgullosa guerrera?"
Yuusuke la miró directamente a los ojos, tratando de provocar la vacilación en su determinada mirada. Habló con ella sobre la guerra, sobre el hecho de que todo era solo una pieza del plan de otra persona, y que aunque su razonamiento y la forma de pensar eran en efecto naturales, en este momento Valerie necesitaba a alguien que pudiera protegerla más que nunca.
"Todos sus subordinados estarán a salvo. La organización, de la que usted y Valerie son parte, debería tomar toda la responsabilidad por eso. ¿Le parece bien?"
"Eso... Pero, aun así...”
Una sombra de vacilación apareció en los ojos de Benefost. Yuusuke se aferró a eso y continuó persuadiéndola contándole su propio pasado.
"Aunque me llaman héroe, no soy el único en el palacio."
El único motivo por el que hacía esto era su propio deseo de proteger a alguien. Los delitos que la Familia Elfdras había cometido eran graves. Valerie era la líder de esta organización, e iba a necesitar a alguien para apoyarla, que explicara lo mucho que estaba involucrada en el control de la organización, y que testificara en su nombre.
"...Entiendo."
Benefost aflojó su cuchillo, abandonando su voluntad de morir.
En verdad, Yuusuke había confirmado informalmente la situación de Valerie con Esvobus y Cliffzah durante el cerco de la ciudad, sin embargo, tenía que inducir un poco de ansiedad en Benefost si quería tener alguna posibilidad de convencerla.
Por el aspecto de Valerie, sus asistentes y los soldados de Viento Afilado, había realizado espléndidamente su tarea.
"¡Gracias, gracias! ¡No tengo medios para expresarle mi agradecimiento!"
Con lágrimas de alegría rodando por sus mejillas, Valerie agarró las manos de Yuusuke, dándole las gracias, y luego saltó hacia Benefost, abrazándola con todas sus fuerzas. La mujer, ignorando el dolor de sus heridas restantes, abrazó a su señora sin siquiera retroceder.
"Lo hiciste bien, señorito Yuusuke."
"Jajaja... Realmente fue un poco estresante."
Yuusuke sonrió con amargura a Sun.
La próxima misión de Yuusuke era acompañar a los miembros de Viento Afilado a Rinwaal para investigarlos. No serían llevados a juicio, sino que se les sometería a interrogatorios acerca de las figuras claves detrás de las bestias malignas modificadas y los funcionarios corruptos de Fonkrank.
Después de ayudar a los soldados heridos gravemente a bordo del carro del Cuerpo Oscuro, el ejército combinado marchó hacia Rinwaal.
• • •
Reifold había visto toda la batalla oculto en las sombras del bosque. Después de que el grupo se fuera, de repente salió a la carretera.
"Parece que Yuusuke ha salido victorioso."
El Rey Esvobus, sabiendo el valor de Yuusuke, envió a Reifold para vigilarlo en caso de que se encontrara con Viento Afilado. Yuusuke no era del tipo luchador, así que Reifold esperaba que se retirara o perdiera la batalla cuando se enfrentara a un enemigo mucho más fuerte. Pero en vez de eso, había sido testigo del joven consiguiendo una victoria imposible.
Los refuerzos de Sanc Adiet, junto con el ejército de liberación, concibieron un plan para reunir a un gran ejército para perseguir a los rezagados en la carretera costera oriental, esta vez reforzaron su ejército con veteranos usuarios de artes divinas.
Mientras que el Cuerpo Oscuro estaba descansando después de la batalla, la reputación de la facción del palacio en contra del Cuerpo Oscuro se había hundido. Incapaces de actuar abiertamente, varias facciones comenzaron a unirse entre sí.
"Él de alguna forma logró abrirse paso. ¿Qué voy a hacer ahora, Su Majestad Homurakabe?" (NT: Homurakabe significa muro de llamas en japonés.)
Exactamente de la misma manera que en la Fortaleza Gearhawk, Yuusuke se había crecido enormemente al enfrentarse al peligro mortal, y superó con facilidad las expectativas que el rey tenía de él.
• • •
Airzah, junto con más de diez controladores de bestias malignas, estaba escapando por la línea costera, ocultándose debajo de los acantilados.
"¡Oye, eres demasiado lento! ¡Date prisa!"
Abandonó a Fortress y escapó del palacio real cuando fue recuperado por el ejército de liberación. Huía hacia el este, en dirección a las minas de Rudea. Una vez allí, quería viajar por la carretera y llegar a la base de la organización antes de que el enemigo consiguiera Rinwaal.
En la base, esperaba tomar todas las cosas de valor como liquidación y pasar desapercibido durante un tiempo. Airzah estaba convencido de que, con su capacidad, las bestias malignas restantes y sus conexiones con el mercado negro, iba prosperar en el mundo clandestino.
"Una de las bestias se está quedando atrás. No la pierdas, idiota."
Hambrientos, los controladores de bestias apenas se mantenían en pie, y andaban inestables. Por supuesto, aun estando así, luchaban por controlar a sus bestias. Por otra parte, cada uno de ellos ahora llevaba tres bestias, cuando en realidad solo estaban preparados para controlar a dos de ellas al mismo tiempo.
Airzah, ignorando sus quejas, les dio instrucciones para controlar a las tres bestias, con el argumento de que no deberían tener problemas dado que solo tenían que moverlas.
¿No es culpa de ese tipo que tengamos que escapar, en primer lugar?
Los soldados comenzaron a culpar a sus tres comandantes por arrebatarles su tranquila vida en la base de la organización y echarlos a una sangrienta lucha por la supervivencia. El ex tesorero oficial interrumpió estos pensamientos escupiendo otro impulso. Con la parte superior de la organización destruida, ahora se había convertido también en un fugitivo.
Si nos hacemos con su cabeza...
Una sombría luz se reflejó en los ojos del controlador cuando este tocó suavemente la flauta mágica.
"¡Duele! ¡Duele, duele, duele! ¡¿Qué demonios estás haciendo?! Explícate... ¡PARA! ¡PAR...!"
Finalmente les dio un poco de alimento, los animales mordieron ansiosamente la cálida carne. Los controladores no parecían perturbados por las bestias que habían encontrado el cuello de su comida, y cuando Airzah trató de defenderse con las manos...
"Eh, eh, es inútil. Todavía hay otras bestias."
El controlador se rió en voz baja, casi gorgoteando. Por supuesto, sus animales eran más fuertes que el tesorero oficial. El hombre trató de coger su flauta, pero se le escapó de la mano y cayó en una grieta entre las rocas.
"¡Oh, qué pena! Chicos, ¡vayan a comer allí!"
Asegurándose de que estaba a salvo, el controlador se acercó al cuerpo de Airzah, agarró la cabeza por el pelo y tiró de él. Los controladores de bestias malignas restantes se unieron a su compañero y les permitieron a sus animales alimentarse de los restos que ahora estaban divididos en seis partes.
"¡Ah! ¡Basta! ¡No pueden comerme! Hey, aléjense de mí. Soy su..."
Todavía con hambre, las bestias atacaron a su amo. Después de un tiempo, las olas estaban lavando la sangre de la playa vacía.
Con el hambre saciada, la sombra del desastre había desaparecido en la oscuridad que se había tragado la costa...





7 comentarios:

  1. Muchas gracias por el esfuerzo que realizan.
    Umo... Yuusuke se está convirtiendo en la personificación de un héroe (no está matando ni una mosca)¿se hará baddas?

    En la parte final, las bestias también se comieron a su cotrolador, ¿no?

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    1. si se los comieron al final las mismas vestias mataron a sus controladores por pura sed de sangre

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