09/08/2024

Re:Monster - 596 (parte II), 597 (parte I)



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Novela original en japonés por: 金斬児狐 (Kanekiru Kogitsune)

Re:Monster


Traducción: Xeniaxen



Día 596
(parte II)


Después de echar un vistazo a todos por encima, le pregunté al joven deforme qué había sucedido. Había habido algunos disturbios debido al ataque del trol gigante del otro día. Se ve que habían relacionado al presidente hombre tigre con nosotros y el nuevo grupo clandestino incipiente liderado por el trol había atacado la mansión.

Mientras se estaba haciendo de noche, el hombre tigre estaba de camino a nuestra casa, escoltado por sus hombres, porque quería hablar conmigo. Les tendieron una emboscada. El hombre perro, que es su jefe de seguridad, había parado el primer golpe sorpresa dirigido al hombre tigre. Si no hubiera sido por él, probablemente no hubiera podido contarlo. Todos entraron en pánico debido al repentino acto de violencia, pero lucharon por sus vidas.

El mismo presidente no se quedó atrás y se volvió contra los enemigos. Sorprendentemente, fue una pelea bastante pareja. Por suerte, el líder de la banda enemiga, el trol, no estaba entre ellos. Aun así, sus secuaces habían sido mercenarios en el extrarradio de la ciudad, por lo que eran tipos bastante fuertes. Pusieron al límite a los hombres del presidente tigre, que lograron huir a nuestra mansión, de la que ya estaban cerca cuando los atacaron.

El grupo los persiguió buena parte del camino, pero se echaron atrás al ver las decenas de gólems de defensa que tenemos en el jardín. Algunos inconscientes entraron igualmente y vieron su fin a manos de los gólems. El resto escapó con vida.

Mis hombres apartaron los cuerpos del camino para examinarlos después de asegurar a todas las víctimas. Estaban usando los gólems curativos que había preparado para ocasiones como esta para cuidar del presidente hombre tigre y sus empleados. Gracias a eso, hoy podrán pasar una noche tranquila y mañana ya podrán irse por su propio pie.

Ahora solo queda una cosa por hacer... Si el presidente de Manpower Calledonier, compañía apadrinada por Lanza Ebria, ha sido atacado... está claro cuál tiene que ser nuestra respuesta.

Le agradezco haber llegado sano y salvo hasta mi mansión.


Día 597
(parte I)


En la Ciudad del Libre Comercio, Sectriad, hay todo tipo de compañías. Está llena de tiendas y restaurantes, pero también se mueven asuntos oscuros, como barrios rojos llenos de lujuria y garitos de juego donde se reúne gente muy peligrosa. Lo tienen todo encubierto, desde el contrabando de productos ilegales, hasta la venta de esclavos o los escenarios clandestinos donde muchos se disputan entre la vida y la muerte.

Todos estos negocios clandestinos están bajo el control de Diabolica, una compañía miembro de las Siete Asociaciones de Comerciantes Principales, tan importante como la compañía del presidente enano. Es la organización más violenta de todas, y siempre actúa de manera encubierta.

Solo unas horas después del repentino ataque a la mansión, fuimos a una de las áreas de entretenimiento más conocidas de Sectriad, la Ciudad del Libre Comercio. Las estrellas del hermoso cielo nocturno, opacadas por el deslumbrante alumbramiento de ciudad.

Dada la singularidad del sitio, entrada la madrugada, la calle principal aún estaba atestada de gente. Los restaurantes irradiaban ajetreo y bullicio. Muchos empleados, hombres y mujeres, trataban de atraer clientes a sus locales. La marabunta era infinita, y sus pensamientos y deseos se podían palpar en el ambiente.

Para nuestro propósito, lo mejor era evitar calles como esa, ya que las fuerzas enemigas la tienen vigilada y no hay forma de detectar cómo. Si quisieran lanzar un ataque sorpresa, nosotros estaríamos en desventaja.

Así pues, el presidente tigre y los 20 subordinados que me acompañaban se equiparon con armaduras negras gólem para ocultarse en la oscuridad y avanzar de sombra en sombra por los callejones. Progresamos en silencio por la ciudad, a veces usando los brazos secundarios de nuestras mochilas para colgarnos de las paredes o subirnos a los tejados.

Nos abrimos paso entre las redes de vigilancia enemigas sin ser descubiertos, y llegamos a nuestro destino: un casoplón.

El lugar desentonaba claramente con los edificios de su alrededor. Estaba situado en un callejón sin salida, conectado solo por dos calles a las que era bastante difícil llegar si no conoces el camino. El acceso estaba diseñado para prevenir invasiones enemigas, así como los altos y gruesos muros exteriores, que hacían que pareciera una fortaleza.

Era la casa de la familia Talmsand, la encargada de controlar todos los negocios del distrito del entretenimiento.

Talmsand es propietaria de Kvesrot, una compañía de trabajo temporal liderada por un hombre bestia cuco (NT: Pájaro.), que es bastante amigo del presidente tigre. Es una de las organizaciones con más renombre de la ciudad.

Era una casa enorme, con muchos centinelas vigilando la zona. Incluso tenía partes escondidas por artículos mágicos o técnicas de ocultación. En realidad, su defensa no era para tanto. Podríamos haberlos vencido fácilmente sin mucho esfuerzo. Pero toda cautela es poca.

Dentro del casoplón había nerviosismo por nuestro negocio de gólems, sobre todo por parte del jefe de Talmsand, un hombre tejón que viene de un linaje de dragonoides, y del jefe de Kvesrot, el hombre cuco. Talmsand tiene varias compañías de transporte y de compraventa de materiales, que quieren el monopolio. Por eso, contrataron al trol para causar el ataque. En ese momento, estaban reunidos todos dentro.

En la reunión, obviamente, trataron el tema del fracaso de su misión y de nuestra inesperada fuerza defensiva. Aunque, bueno, para mí no fue fortuita, pero sí que hubo algún que otro infortunio.

Se ve que algunos de los enemigos actuaron imprudentemente porque no estaban de acuerdo con el plan. Estoy un poco confundido sobre qué hacer con ellos. Hubiera sido más fácil aniquilarlos a todos. Le fui dando vueltas mientras reuníamos información a tiempo real a través de los pequeños gólems retransmisores que instalamos de antemano en los enemigos. Al mismo tiempo, nos infiltramos en el interior del casoplón.

Una pequeña exploración preliminar con otros gólems nos reveló que sería relativamente fácil entrar por el techo. Allí tenían menos centinelas, en comparación con el suelo, aunque tenían artículos mágicos de seguridad especiales para compensarlo.

Ocultamos nuestra presencia con algunos artículos mágicos que conseguí en Historinor, la Ciudad del Tiempo y la Historia. Naturalmente, nuestros artículos mágicos eran mejores que los suyos y, junto con la agilidad de la armadura gólem, pudimos colarnos en el casoplón sin problemas.

Hubo centinelas a los que no pudimos sortear debido a la estructura de la casa. Pero en esos casos, unos pequeños gólems en forma de mosquito nos fueron de mucha utilidad para acercarnos silenciosamente por el aire. Estos les clavaron su probóscide mágico metálico en la nuca y los neutralizaron inyectándoles una poción mágica que causa [Aturdimiento], [Parálisis] y [Agarrotamiento]. A simple vista, parecía que siguieran de pie, vigilando. Pero en realidad quedaron inconscientes.

Una vez entramos al interior, nos permitimos ser menos cautos que afuera. Así, avanzamos rápidamente por los pasillos de la casa.

Todo estaba yendo tan rápido que, más que excitado, el presidente tigre estaba un poco asustado. Podía verle la contrariedad en la cara mientras progresábamos por el casoplón de los Talmsand, un sitio por el que muy difícilmente uno podría pasearse a solas. En parte, fue divertido verlo así.

Pero entonces, un enfrentamiento inevitable empezó de repente justo antes de que llegáramos a nuestro destino.

En un pasillo ancho y sin decorar, de unos 40 metros de largo. Estábamos rodeados de unas gruesas paredes y no teníamos lugar donde escondernos. La última línea de defensa del enemigo, dos guardias que custodiaban la gran puerta que separaba la parte más profunda del resto de la casa, nos detectaron. Era imposible pasar por allí sin que te vieran. Y no en vano, se veían dos tipos bien hábiles.


Continuará.


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