Dos secuaces que todavía eran goblins ayer subieron de rango hasta Hobgoblins.
Mientras pensaba “Es el segundo día seguido, ¿eh?”, les di un regalo de enhorabuena.
El entrenamiento matutino terminó sin problemas, y comí lo que las hermanas me prepararon. Gobue-chan, que debería haber estado en las minas, me vino a ver en pánico.
Llevaba algo pequeño y marrón con un brillante rojo en la frente, tenía cortes profundos repartidos por todo su cuerpo. Estaba cubierto de sangre, igual que yo lo estuve un tiempo atrás. Podía saber por su respiración entrecortada que probablemente iba a morir en cualquier momento.
Lo llamé “Carbunclo” (nombre provisional) por aquel entonces. Gobue-chan me pidió que lo ayudara con una de mis Habilidades de Recuperación, así que lo traté con [Curación].
No lo podría haber curado si hubiera empezado diez minutos más tarde. Me sentí aliviado porque de algún modo llegué a tiempo y conseguí curarle las heridas.
A pesar de eso, curación no devuelve la sangre perdida. Carbunclo se quedó dormido después de que le hiciera beber una poción hecha por Alquimista-san, una “Poción Hematopoyética[1]” (Prototipo) hecha a partir de la mezcla de varias plantas con propiedades de regeneración sanguínea. Para la suerte de esa cosa, no me había quedado con hambre después de comer, así que no tuve ganas de comérmelo. Además, Gobue-chan me pidió que lo ayudara y eso fue lo que hice.
Unos pocos minutos más tarde, el Carbunclo de 30 centímetros abrió los ojos y nos explicó la situación en que se había visto envuelto.
Nos dio las gracias.
“Muchísimas gracias”, dijo.
El nombre del Carbunclo era Returner[2]. Según la historia que nos contó cuando le preguntamos por qué estaba lleno de heridas, la razón de ser lastimado fue debido a un grupo de aventureros humanos.
El brillante rojo, magníficamente soldado en su frente, parecía un súper artículo de alta clase. Si lo vendiera, su precio probablemente oscilaría alrededor de cien millones de monedas de oro —creo que una moneda de oro son diez yenes—, seguramente ese brillante era el objetivo de los aventureros.
Cuando pensé que había tenido suficiente, entonces esa cosa se arrodilló y nos pidió/suplicó que hiciéramos algo en contra de los humanos.
Esto es lo que entendí después de haber escuchado su historia:
1. Parece que Returner es un Carbunclo artificial creado hace mucho tiempo por el mago legendario Velvet, reconocido por todo el continente. Es el encargado de la [Tesorería Oculta de Velvet] —una estructura reconocida en este mundo como una mazmorra— en donde Gobue-chan y los demás llegaron mientras excavaban buscando Piedras Espirituales.
2. A pesar de que las heridas superficiales que le traté parecían haberse estabilizado, en realidad su “núcleo” —aunque Returner era un Carbunclo artificial sin vida y sin un determinado ciclo vital, al parecer si su núcleo se rompía eso le podía causar la muerte— estaba profundamente dañado cuando los humanos lo atacaron. La curación parecía haberle prolongado la vida antes de que desapareciera.
3. En la parte más oculta de la Tesorería, había gemas de Clase [Legendaria] y elixires que se encontraban entre lo más valioso de los artículos mágicos recolectados meticulosamente por Velvet a lo largo de su vida. Returner no podía tolerar de ninguna manera que la cámara del tesoro llegase a ser saqueada salvajemente por esos imbéciles cegados por la codicia y sus tesoros terminen siendo robados.
4. Returner quería resolver este problema por sí mismo, pero no tenía fuerzas suficientes para combatir. Y disponía de un tiempo limitado, pues su núcleo estaba dañado.
En la mazmorra había criaturas mágicas: el “soldado esqueleto”, el “guerrero esqueleto” que era más fuerte, y el “gran esqueleto” de nivel avanzado. Pero en contra del equipo de aventureros estas criaturas eran peor que inútiles.
Por eso el Carbunclo nos pidió a nosotros, que parecíamos ligeramente más fuertes, que sacáramos a los aventureros de allí y, sobre todo, que cubriéramos con tierra las otras entradas.
5. Si conseguíamos solucionar el problema, el Carbunclo nos iba a entregar el contenido de la cámara del tesoro a modo de agradecimiento. Velvet odiaba a los humanos, así que estaría de acuerdo con darnos el tesoro a nosotros, ogros y goblins.
Después de sopesarlo detenidamente, no le pude encontrar ningún inconveniente al plan.
Llamé a Gobukichi-kun, Gobumi-chan, Gobue-chan, y luego a ambos Hobusei-san y Hobusato-san para que se armaran adecuadamente. Después de eso, le pedí a Herrera-san que me trajera el cuchillo hecho de piedras espirituales. Pensé que tener un arma era mucho mejor que ir desarmado.
Ya que el Cuchillo de Piedra Espiritual era de apariencia llamativa, pensé que me podía ser útil para disuadir a los enemigos.
Cuando empecé a instruir a mis goblins subordinados; Herrera-san, Pelirroja, las dos hermanas, y Alquimista-san me miraron, con expresión incómoda.
Eso fue porque escucharon sobre la misión de matar humanos. Iban a sentir cierta incomodidad, aunque fueran desconocidos.
De todos modos, como Returner lo pidió, los sacaremos de la mazmorra sea como sea. Emboscaremos a los aventureros y ganaremos la batalla sin matar a nadie.
Primero los intentaremos persuadir, si eso no funciona, entonces y solo entonces recurriremos al uso de la fuerza. Dije que para protegernos debíamos utilizar todas nuestras fuerzas, pero seguramente eso significa tener que matarlos al fin y al cabo.
“Es en defensa propia, no podemos evitarlo, si no nos matarían, ¿no?” les dije.
Cuando les dije que hablar era importante, y les mostré mi sonrisa, ellas estuvieron más o menos de acuerdo.
Habiendo terminado las preparaciones, Gobue-chan nos llevó hasta el agujero que conectaba con la mazmorra que dirigía Returner.
Al final, esto fue lo que sucedió.
Matamos a los seis aventureros, hombres y mujeres, que habían entrado a la mazmorra y habían intentado matar a Returner.
Bueno, primero los intentamos persuadir.
En un primer momento, para evitar que entraran en pánico debido a nuestra superioridad numérica, ordené a Gobukichi-kun y los demás que se escondieran y fui a persuadirlos yo solo. Por mi parte fue un acto de buena fe.
Pero en cuanto me vieron se alarmaron. Dijeron algo como “Esta mazmorra no solo tiene Grandes Esqueletos, también tienen subespecies de Ogro aquí. Este desgraciado tiene muchas debilidades. Aunque sea un oponente problemático, no es rival para nosotros. Vamos a acabar con él rápidamente. Si lo dejamos escapar nunca vamos a encontrar nada como esto.” Y empezaron a atacarme con intención fulminante.
Yo no soy una subespecie de Ogro, sino una variante rara. En primer lugar, no querían escuchar lo que les decía, ni siquiera un poco. Sois unos ladrones, pensé.
Bueno, cosas como infiltrarse en propiedades ajenas (mazmorras), matar despiadadamente a sus habitantes (monstruos) —aunque no fuera a mí— y salir sin más habiendo saqueado los tesoros que había dentro…… Esto es, sin lugar a dudas, un caso de robatorio con asesinato, ¿¡sí o no!? Además, ni siquiera son conscientes de su crimen; ¡esas personas no merecen seguir con vida!
Mientras tanto, tras usar [Estimación], vi que toda la equipación de los ladrones estaba formada por artículos de alta clase dotados de magia o algún poder similar. Incluso por su apariencia ese grupo emanaba un aura de fuerza considerable.
No obstante, no sentí nada parecido a la desesperación que sentí luchando contra el Oso Rojo, ya que siendo una [Rara Variante] de Ogro había incrementado mis habilidades básicas, y ahora podía usarlas repetidamente. Sentí que defenderse de los ataques de los ladrones era una cuestión simple.
Es decir, pude juzgarlo por mí mismo con solo ver su primera reacción.
Su ataque era totalmente torpe. Su intención también era relativamente pasiva. No solo fueron incapaces de sujetar sus armas de manera eficiente, sino que fueron fácilmente predecibles y mezclaron su ofensiva con fintas demasiado complejas para ellos.
Eso sí, sus ataques cortantes fueron rápidos, y sus armas eran de calidad superior. Si hubieran luchado contra un ogro común, lo hubieran dejado mutilado. Sin embargo, bajo mi punto de vista, sus técnicas de combate no iban a la par con sus capacidades físicas. La impresión que tuve de su ataque fue que lo tenían bastante crudo.
Ya fuera porque su cuerpo se había vuelto más fuerte por sus niveles, o bien por buffs[3] obtenidos por su [Profesión], eran relativamente poderosos. Pero, a la vez, eso podría estar impidiendo que se esforzaran por aumentar su potencial, sin pensar en dónde ponían sus espadas por delante suya, en subir los niveles de técnicas útiles y demás. Nunca pensaron que confiar en esas técnicas probablemente solo les supondría una molestia.
Hasta entonces seguramente habían estado subiendo de nivel matando a sus oponentes usando solo fuerza bruta, por lo que instintivamente habían empezado a esforzarse menos en los combates.
Mi intención no es encontrar fallos en los asuntos de los demás, pero sus técnicas actuales eran demasiado letales para ellos mismos.
Si se hubieran esforzado más, probablemente habrían sido capaces de luchar contra mí como iguales. De hecho, sus habilidades básicas eran así de elevadas. Pero habiendo descuidado su entrenamiento, la verdad es que no eran oponentes para mí.
Me podía permitir un margen de error porque eran débiles, y podía defenderme con facilidad de todos sus contraataques con mi bloqueo. Mientras esto ocurría, yo continué con mi intento de persuadirlos.
Normalmente, cuando unos ladrones te están intentando asesinar, no consigues convencerles.
Les hablaba mientras me atacaban, y de las penumbras de la mazmorra salió un joven [Mago] y lanzó una magia basada en [Relámpago] que estalló en un *BAM*. Estuve a punto de caerme, pero acabé retrocediendo uno o dos pasos del susto. El daño resultante tan solo llegó al punto de hacerme sentir un poco resentido.
Aunque por su tamaño parecía un ataque más bien pequeño, me hubiera matado de no ser por mi Resistencia Multielemental y mi Resistencia Relámpago. Su poder era tan grande que me hubiera volado la cabeza sin dejar ni rastro.
Ah, según lo esperado. Esto ya había llegado demasiado lejos, no había forma de evitarlo. Mi paciencia ya estaba rozando sus límites.
Le envié una señal a Gobukichi-kun y compañía, quienes se encontraban escondidos esperando para atacar.
Disculpándome mentalmente con Returner, bloquee el único escape de los aventureros destruyendo una parte de un misterioso corredor hecho de ópalo. Me planteé “¿Qué es esto, un palacio real?”.
Y con tal de llamar la atención de los aventureros, los ataqué de frente.
Sí, aunque inicialmente pensaba que la habilidad del Cuchillo de Piedra Espiritual era simplemente emocionante, resultó siendo realmente increíble.
Mientras que la hoja del cuchillo no era nada afilada, porque estaba hecha de Piedras Espirituales de Agua, el agua salía a presión del cuchillo en cada estocada. Cuando le cogí el truco a atacar con esa cosa, el agua iba saliendo más rápidamente y se convirtió en una espada de agua. Corté la armadura de un aventurero por la mitad, con su respectivo contenido (sus entrañas) haciendo un ruido importante.
“¡Impresionante!” fue lo que Gobumi-chan dijo, seguido de una pregunta sobre si ella podría o no partirlos en dos del mismo modo, pero le respondí que si tras el agua no había ninguna fuerza que la controlara, el cuchillo no cortaría al enemigo, solo lo mojaría.
Era bastante inútil sin una velocidad de manejo adecuada, aunque seguía siendo guay.
Después de matar a todos los aventureros, destripamos los cuerpos y nos los comimos. Yo me pedí las cabezas. Gobukichi-kun y los demás compartieron los torsos y las extremidades.
Habilidad [Profesión-Asesino] aprendida
Habilidad [Profesión-Defensor] aprendida
Habilidad [Profesión-Guardián] aprendida
Habilidad [Profesión-Hechicero] aprendida
Habilidad [Profesión-Obispo] aprendida
Habilidad [Profesión-Encantador] aprendida
Habilidad [Pensamiento Veloz] aprendida
Habilidad [Pensamiento Lateral] aprendida
Habilidad [Equitación] aprendida
Habilidad [Anti-magia] aprendida
Habilidad [Hechizo Reducido] aprendida
Habilidad [Caballerosidad] aprendida
Habilidad [Intuición] aprendida
Habilidad [Presencia Encubierta] aprendida
Habilidad [Semidiós de la Protección Divina de la Merced] aprendida
Habilidad [Semidiós de la Protección Divina de la Guerra] aprendida
Como esperaba, incluso entre los humanos, ser un aventurero significa que necesitas tener un nivel considerable.
Ellos tenían mucha equipación de alta clase. Entre sus pertenencias encontramos varios artículos mágicos bastante útiles. Me los comí inmediatamente, por supuesto.
Habilidad [Estado Encubierto] aprendida
Habilidad [Inventario] aprendida
Lo que comí eran dos artículos mágicos diferentes; “Anillo de Hermitaño” y “Espacio en Mochila (Grande) x6”. Guardé el resto de artilugios de los aventureros en mi nuevo inventario. Cuando quiero retirar un objeto, suena un *pon* y el objeto aparece.
Esta habilidad me ha hecho sentir nostalgia. Puedo almacenar hasta 1200 objetos diferentes y puedo agrupar hasta 99 objetos iguales en una sola pila, lo que es básicamente hacer trampas.
Después de eso Returner nos guió hacia la entrada de la mazmorra. En la parte más profunda de la cueva, encontramos una entrada oculta. La bloqueamos de modo que la única entrada fuera la que Gobue-chan hizo. Habiendo destruido esa abertura, nadie podría volver a entrar a la mazmorra.
El Carbunclo nos llevó hasta la tesorería, donde todos lo vimos.
Había varios tesoros de valor; la equipación de los aventureros que habíamos conseguido antes no era nada comparado con el vasto poder mágico que ostentaban los artículos mágicos allí presentes. Había muchos artículos interesantes. En la parte más profunda, había una momia con un extraño brazo izquierdo brillante y plateado, aposentada en un trono.
Returner dijo que esa momia era su jefe. Es decir que probablemente nos hallábamos delante de Velvet.
La vida de Returner estaba a punto de concluir y antes de que eso sucediera quería contarnos una cosa.
Una amplia variedad de Piedras Espirituales podía ser encontrada en las minas de nuestra actual casa, por la influencia de esa mazmorra. Normalmente, dependiendo del tipo de Piedra Espiritual, podían encontrarse en un ambiente acorde con su atributo —lugares con buena ventilación escondían Piedra Espiritual de Viento, lugares calientes como volcanes ocultaban Piedra Espiritual de Fuego—, las Piedras Espirituales de elementos diferentes no se encontraban en el mismo sitio.
Sin embargo, como esa mazmorra fue construida por Velvet, el excelente domador espiritual, de algún modo los espíritus que no encajan aquí pueden permanecer en este lugar. Así pues, es posible encontrar una gran variedad de Piedras Espirituales gracias a la influencia de la mazmorra.
En cuanto terminó de hablar, como si ya hubiera alcanzado su fin, Returner sonrió ligeramente y desvaneció.
*Clink*
Y de él solo quedó el brillante rojo de su frente.
Lo cogí y me lo comí.
Habilidad [Regla Dorada] aprendida
Por el momento, dedicamos una plegaria silenciosa a Returner.
Y luego me llevé todas las riquezas del tesoro. La habilidad Inventario es realmente asombrosa. Incluso podría apropiarme todo el tesoro y todavía me sobraría espacio. Sí, y todo gracias al grupo de aventureros de antes.
Pensando en eso, solo el Velvet momificado con el brazo izquierdo de apariencia extraña permanecía en el sombrío templo y la cámara del tesoro. Como imaginé, no podía llevármelo tal y como estaba, así que después de recuperar el trono con gemas incrustadas, incineré a la momia.
Alzando la cabeza, junté las manos en forma de plegaria y dije “Namu”. Y a medida que el fuego ardiente se sosegaba, solo quedó el extraño brazo artificial, brillante y plateado, yaciendo en su lugar.
“¿Qué es?” pensé mientras usaba [Estimación].
Nombre: [Brazo Artificial de Plata - Airgeatlámh]
Clasificación: [Artefacto]
Rango: Clase [Legendario]
Habilidad: [Supresión de Arma] [Supresión de Hechizo] [Mutación] [Eco Elemental]
Detalles: Un brazo artificial divino que fue portado por Velvet, encontrado en las profundidades de cierta mazmorra antigua. Todos aquellos que hayan perdido un brazo pueden obtener un brazo equipable y con el mismo llevar a cabo cualquier movimiento de manera precisa.
Mediante la aleación del brazo con otro tipo de metales, es posible cambiarle la forma según las intenciones de quien lo vaya a usar. Esta habilidad mejora con cada uso. La destrucción de este artículo es básicamente imposible.
Eso era.
Hm, ¿Velvet me estaba diciendo “Ya no necesito esto, por eso te lo entrego” a mí que perdí mi brazo izquierdo? Cogí el artilugio por el codo y me lo coloqué en el muñón que tenía por brazo. De algún modo fui capaz de ajustármelo.
La primera impresión que tuve: esto hace un daño de mil demonios.
Pero bueno, conseguí encajarlo mejor y sus tentáculos metálicos salieron de su centro y me cubrieron el brazo hasta arriba del hombro. Luego empezaron a hacerme algo como si me estuvieran devorando la piel, el dolor era tan intenso que casi me desmayé.
Tras recuperarme de mis berridos, mi brazo izquierdo se había convertido en Airgeatlámh hasta el hombro. El brazo de plata, que era del tamaño del de un humano cuando lo recogí, habría sido de lejos demasiado pequeño para un ogro como yo. Pero no sé cómo se había transformado hasta alcanzar el tamaño de mi brazo derecho, tanto en longitud como en volumen; se adecuaba a mí.
Esos debían de ser los efectos de [Mutación].
No me sentía incómodo ni cuando contraía y destensaba los cinco dedos. No sentía nada raro. Era como una parte más de mí.
Además, podía notar el tacto de las cosas, y cuando trataba de golpear una pared no sentía dolor alguno. Si bien podía entender que no sintiera dolor al tratarse de un brazo protésico, me preguntaba cómo era posible que me transmitiera el sentido del tacto.
Era incapaz de comprenderlo, y como no tenía ni idea de cómo funcionaban las habilidades, en primer lugar, no me iba a atormentar demasiado pensando en ello por ahora.
También, las limitaciones de movimiento de la articulación del codo parecían permitirme una movilidad infinita, y podía llegar a hacer mil trucos de todo tipo. Podía rotar la muñeca y los dedos como un taladro, y podía mover el codo y el hombro en ángulos imposibles para la estructura de un esqueleto de ogro.
Y confirmé que podía utilizar correctamente mis habilidades mediante el brazo de plata. Era capaz de producir mis hilos de araña sin problema con las puntas de los dedos tan afiladas.
Sí, había obtenido una cosa malditamente buena.
Aunque podía arreglármelas con mis dedos escurridizos, como suponía, tener una base sólida me permitía gestionar los problemas con más facilidad.
Después de eso, volvimos a la base y celebramos una fiesta. Ya que fue el final de una gran batalla, y de entre todas las cosas que obtuvimos del grupo de aventureros —esto es importante— había unas botellas de alcohol, ¿cuándo íbamos a celebrarlo si no era entonces?
Eso fue, también, para despedir las almas de Returner y Velvet.
En el caso de Velvet, quizá no me importara tanto, porque ya llevaba mucho tiempo muerto. De él solo me preocupaba la atmósfera mágica que nos rodeaba.
Les conté los detalles de nuestra hazaña a Pelirroja, Herrera-san y los demás, intentando ganarme su consentimiento.
A pesar de que fui persistente en intentar convencerlos, tratándose de humanos avaros me fue completamente inútil.
Pero bueno, ¡¡el alcohol estaba delicioso!!
