6to Requerimiento: “El Camino por la que Toda Aventura Debe Pasar – UnaCueva Subterránea”

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Novela original en chino por: 御我 (Yu Wo)
⸶La Leyenda del Caballero Sol⸷

Libro 3: Al Rescate de una Princesa

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Sexto Requerimiento para Rescatar a una Princesa:

“El Camino por la que Toda Aventura Debe Pasar – Una Cueva Subterránea”

Abrí mis ojos lentamente, sin tener ni la más mínima idea de en dónde estaba o qué había sucedido. Fue entonces que un dolor punzante en la cabeza me recordó lo que había hecho ayer en la noche…… y los resultados de ello – tenía resaca.

¿Resaca? ¿De verdad me embriagué? ¿Cuántas botellas de vino ordenó mi maestro? No debí tratar de sacarle un diez por ciento extra de la recompensa al Caballero Sol más fuerte de la historia…… ¡mis bebidas de anoche debieron costarle ese diez por ciento!

Miré a mí alrededor tratando de orientarme un poco, pero inmediatamente abrí mi boca cuando miré hacia abajo….

“¡¡Aahhhhhhhhhhhhhh!!” Grité.

Mis pies no estaban sobre tierra firme como yo pensaba, de hecho, el piso estaba al menos ¡veinte metros debajo de mí! ¡¿Cómo diablos subí tan alto?! (¡Esto es aún más arriba que la torre más alta del Templo Sagrado!).

“¡¡Aaahh!! ¡Ah! Oh Diosa de la Luz, ¡no deseo ser tan alto!” Continué mis gritos “¡Prometo no volver a beber secretamente a tus espaldas!”

“¡¿De qué te quejas, en nombre de la Diosa?! ¡Que no tienes nada mejor que hacer que gritar en la mañana!” Se escuchó la voz de mi maestro, irritado.

“Técnicamente, ya es pasado el mediodía.”

Y esa fue la voz de Alstier.

Giré mi cabeza hacia un lado y ahí estaba él (mi maestro). Él también estaba flotando en medio del aire, bostezando y estirándose como si se acabara de despertar de un sueño profundo… ¡En verdad que me impresiona! Incluso flotando en medio de la nada, su admirable persona es capaz de estirarse con gracia y con una sutileza digna de un ex-Caballero Sol de veinte años.

Y ahora que he observado bien mis alrededores, me di cuenta que había una tercera persona flotando con nosotros. Supongo que esa figura completamente cubierta por una capa es nada más y nada menos que el mismo Alstier.

En ese momento Alstier estaba irradiando una enorme cantidad de aura de viento.

“¡¿Puedes volar?!” Exclamé sorprendido. Asumí que Alstier sería un maestro de las artes oscuras.

Al ser una criatura oscura la magia negra le es natural, mientras que las otras ramas de la magia, le deben ser muy difíciles de aprender.

“Al principio no.” La figura encapuchada se volteó hacia mí, revelando la cara familiar de Alstier. Parecía exasperado mientras explicaba, “Pero, Neo insistió en que la magia de viento nos sería inmensamente útil al viajar y me obligó a estudiarla. Batallé mucho para aprenderla, pero al final logré dominar dos técnicas de viento: Teletransportación Instantánea y Vuelo.”

“Ah, ya veo.” Le dije, sabiendo por experiencia cómo se sentía. “A mi maestro siempre le ha gustado forzar a otros a aprender cosas extrañas, así que vete acostumbrando.”

“Puedo ver que tú también has sufrido.” Dijo Alstier empáticamente.

“No es nada. Ya quedó todo en el pasado para mí, pero ahora es tu turno de soportarlo…”

“Estoy aquí.” Dijo mi maestro fríamente.

Alstier y yo nos sonreímos y nos quedamos callados.

Sin embargo, no pude evitar hablar otra vez, “Maestro, ¿a dónde vamos?”

Me lanzó una mirada y preguntó dudoso, “No habrás olvidado la búsqueda que te mencioné ayer en la noche por beber tanto, ¿verdad?”

“Claro que no.”

Asintió con la cabeza y luego me explicó, “Justo ahora estamos en camino de completar esa búsqueda. Si volamos, el viaje no debe llevarnos demasiado tiempo y así tú serás capaz de reunirte rápidamente con el resto de tu equipo.”

Eso es cierto. Pensé Si esta búsqueda no lleva demasiado tiempo, puede que hasta sea capaz de alcanzarlos más rápidamente que viajando por mi cuenta.

Resuelto mi problema de transporte, dirigí mis pensamientos hacia la búsqueda que hacíamos ahora.

“¿De qué se trata esta búsqueda?” Pregunté.

Mi maestro sonrió levemente y dijo, “No te preocupes, es una tarea muy sencilla, especialmente para alguien como tú.”

“Ah, ya veo, ¡jajá!” También le lancé una sonrisa igual de falsa. Cuando mi maestro decidió entrenarme para caer elegantemente, utilizó exactamente el mismo cálido tono de voz… Volteé para ver a Alstier, quien ya tenía una mirada de determinación resignada en su cara.

Estaba considerando mis posibilidades: si brincaba desde veinte metros de altura y luego corría por mi vida mientras el Caballero Sol más fuerte de la historia me daba caza; o si lo seguía  hacia mi perdición. Entre los dos, ¿en cuál creen que tenga más probabilidades de sobrevivir?

Mmmmm… ambos se ven igual de prometedores (nada).

◊♦◊♦◊♦◊♦◊♦◊♦◊

Después de volar por un día y una noche enteros, estuve a punto de alabar los impresionantes poderes de Alstier por ser capaz de mantener un hechizo de Vuelo por tanto tiempo, pero entonces tocamos tierra y él astutamente anunció, “Usé toda mi energía en el ‘Vuelo’, así que ahora todo depende de ustedes.”

Maldito astuto elfo oscuro sinvergüenza…

Después de maldecir silenciosamente a Alstier, fijé mi atención en la cueva oscura tras nosotros. Ni una sola cosa crecía a cien metros de la cueva y la misma cueva emanaba pesadas ondas de aura oscura. Y como si no estuviera satisfecha con su siniestra e intimidante aura y apariencia, gritos de terror y llantos en agonía podían escucharse venir del interior. Hasta podía escuchar huesos chocando unos contra los otros…

Mi maestro desenvainó su espada y dijo emocionado, “La misión de la búsqueda es eliminar permanentemente la cueva de cualquiera y todas las criaturas oscuras.”

Con eso, me le quedé viendo pasmado. “Maestro, esta es una Tierra Oscura.”

“Ya lo sé.”

“Maestro, una Tierra Oscura es un pedazo de tierra que, por razones desconocidas, continuamente emanará aura oscura, y casi siempre suele ser el sitio de alguna gran batalla o un cementerio, por lo que el número de cadáveres enterrados bajo esta tierra es tan numeroso como las estrellas en el cielo. Todos esos cadáveres continuamente se convierten en muertos vivientes en estas tierras y se arrastran para salir.”

“Ya sé eso, ¿por qué me lo dices? Después de tres años te has vuelto aún más fastidioso.” Se quejó mi maestro impaciente.

No te enojes, no te enojes. Incluso si te enojas no puedes pelear y ganarle… Me concentré en respirar profundamente antes de finalmente ser capaz de convertir las esquinas de mis labios en una sonrisa.

“Si ya sabía todo esto, entonces debe saber que incluso si eliminamos a todos los muertos vivientes de la cueva, ¡la cueva se volverá a llenar de ellas en solo dos días! Es imposible erradicar a todos los cadáveres de este lugar.”

Él sonrió y me contestó, “Claro que lo sé, ¿para qué crees que te traje conmigo?”

¡Debí haber brincado cuando tuve la oportunidad y arriesgarme a ser perseguido por mi maestro! Pero ya es tarde para arrepentimientos. Pero aun así, todavía buscaba alguna manera de salir de esta, “…… Maestro, incluso con mi aura santa en su punto máximo, me es imposible limpiar todo el lugar de su aura oscura.”

“Todavía podemos intentarlo. Y no vayas a olvidar que tienes a la Sagrada Espada del Sol y a mí.”

Aunque todo esto fue dicho calmadamente, sabía que, entre más calmado y compuesto se viera mi maestro, era mayor su determinación para hacer algo.

“¿Por qué insiste tanto en purificar este lugar?” Le pregunté curioso. “Hay cientos de Tierras Oscuras alrededor, ¿por qué esta es tan especial?”

Sonrió levemente y me preguntó, “¿Sabes por qué los alrededores no han sido afectados por esta Tierra Oscura a pesar de estar produciendo cientos de criaturas oscuras continuamente?”

Negué con la cabeza.

“Se debe a que, hace mucho tiempo, un grupo de magos muy poderosos utilizaron un increíblemente poderoso cristal de agua llamado ‘Serenidad Eterna’ y colocaron una barrera alrededor de la cueva, deteniendo así a cualquier criatura oscura que quisiera salir más allá de los cien metros a su alrededor.

Ya veo. Asentí con la cabeza para mostrar mi entendimiento.

Estas Tierras Oscuras son una fuente de preocupación y dolores de cabeza constante para cada nación, por lo que harán lo que sea e intentarán de todo para detener los impactos negativos que emanan de estos lugares, y una manera rápida y efectiva de hacerlo es trabajando con los hechiceros y los sacerdotes para colocar una barrera y sellar a los muertos vivientes dentro.

Nuevamente mi maestro sonrió levemente mientras anunciaba muy calmado su impactante objetivo, “Quiero esa Serenidad Eterna.”

Me quedé pasmado. Así que de eso se trataba todo. Él quiere esa Serenidad Eterna. Pero una vez removido el Cristal de Agua, la barrera colapsaría instantáneamente y los muertos vivientes escaparían de la cueva, causando destrucción y matando inocentes…

Pero sabía que mi maestro jamás permitiría que algo así sucediera, y es por ello que primero tendría que erradicar toda el aura oscura de esta cueva, antes de poder tomar el cristal.

Mi rostro se tornó sombrío ante la idea, pero aun así volteé a ver a mi maestro con un rayo de esperanza. “¿De verdad tiene que tener ese cristal? ¿No puede ser otro?”

Encogió los hombros con indiferencia y dijo, “Solo si puedes encontrar otro cristal tan poderoso como este… pero créeme que he buscado mucho y no he visto nada como la Serenidad Eterna.”

Pensé resignado para mí mismo, Incluso si lo hubiera, probablemente sería más difícil de obtener, de no serlo, alguien más ya lo habría tomado.

Parece que no puedo zafarme de esta.

Mientras me daba vuelta para mirar la oscura boca de la cueva, oré con fervor que ese no se convirtiera en el lugar de mi último descanso…

Pero de verdad sentía que entrar así, sin ninguna preparación, no era algo muy brillante; así que miré apresuradamente al líder de la misión. “Maestro, ¿tiene algún plan para esto?”

“Claro.” Respondió de inmediato.

Al observar su porte lleno de confianza, me llené de esperanza y le pregunté ansioso “¿Bueno? ¿Cuál es el plan?”

Levantó un dedo y apuntó hacia la cueva. “Nos adentramos en la cueva hasta llegar a lo más profundo exterminando cualquier zombi que veamos. Luego, después de un día de descanso y mientras esperamos a que recuperes tu aura santa, purificamos la cueva completamente, tomamos la Serenidad Eterna y así, ¡terminamos satisfactoriamente la misión!”.

Me le quedé viendo en silencio. Si llama a eso un plan, entonces el “Encuentra al enemigo, derrota al enemigo, salva a la princesa y cásate a la princesa” seria El Plan Perfecto para Rescatar Princesas. No habría necesidad de cambiar una sola palabra.

“Pudo haber sido peor.”

Fue entonces que Alstier habló con ligereza, “¿Tienes idea de bajo qué circunstancias tuvimos que completar una misión de infiltrarnos en la guarida de un dragón para robar una corona de su tesoro…?”

“¿Qué circunstancias?” Le pregunté de inmediato. Necesitaba saber con desesperación que tan malo y peor estuvo eso. Era la única manera de convencerme de aceptar mi destino y llevar a cabo esta tarea Herculina.

Alstier sostenía las lágrimas mientras recordaba sus pasados infortunios “El sacerdote no había dormido suficiente la noche anterior, ocupado entreteniéndose en los burdeles, y por ello solo tenía un cuarto de su energía santa; la espada del guerrero se rompió y aún estaba reparándose con el herrero; mientras inspeccionaba la situación delante de nosotros, el ladrón descubrió un baúl del tesoro y huyó con él; el hechicero quemó accidentalmente la mitad de sus pergaminos mágicos mientras cocinaba; y el caballero santo tenía resaca por beber la noche anterior…”

“Espera, ¿quién fue este hechicero idiota que quemó la mitad de los pergaminos?” Lo interrumpí, sintiendo que algo no andaba bien.

“Ese era yo.” Admitió Alstier en voz baja, agachando la cabeza, avergonzado.

“¿Y el caballero santo con resaca?” Tenía un muy mal presentimiento sobre esto.

“Era yo.” Esta vez la respuesta vino de Neo. Me lanzó una mirada amenazante y dijo “¿Tienes alguna queja del Caballero Sol más fuerte de la historia? ¿Mmm?”.

“¡No! ¡Claro que no!” Negué de inmediato. “Pero maestro, su resaca…”

“¡Hmff!” Dio un resoplido y movió la mano con impaciencia. “Por eso no bebí tanto ayer.”

Me sentí aliviado.

“Así que solo tengo poquita resaca.”

“…..”

¡Diosa mía! ¡Michael, Alston, Ann y mi querido Hoja! Ustedes son los mejores miembros de un equipo que alguien podría pedir. Me equivoqué al despreciarlos, ¡sálvenme por favor! Regrésenme a su equipo, ¡no me importa ser el sacerdote!

Desafortunadamente, Hoja y yo no éramos capaces de comunicarnos telepáticamente, así que no vino a rescatarme. Tan solo puedo seguir  a mi maestro reluctantemente al interior de la cueva, sabiendo que mi futuro era tan negro como la cueva a la que entraba…

El instante en que pusimos pie dentro de la cueva, una línea de esqueletos blancos alineados a cada lado de la cueva nos recibieron. Probablemente estos esqueletos eran de los cadáveres más ‘frescos’, (puede que incluso hayan sido aventureros desafortunados que perdieron sus vidas en esta cueva), ya que aún tenían algo de “carne en los huesos” y no se habían podrido por completo. Esto daba un impacto visual muy aterrador, pero más que el impacto visual, pude sentir cómo mi nariz, sufría también.

Mi maestro inmediatamente se pinchó la nariz y gritó, “¡¿Por qué demonios aun no los quemas?! ¡Apestan!”

Le respondí con un resoplido y lancé un montón de luz santa sin problema. El sonido de huesos cayendo al suelo pudo escucharse a todo nuestro alrededor y cuando la luz santa se disipó, el bosque de esqueletos se había convertido en polvo, cubriendo todo el piso de color blanco, como invitándonos a seguir avanzando.

Aunque decía que tenía un poco de resaca, mi maestro fue capaz de destazar a cualquier zombi que se apareciera y limpiar el camino para nosotros. A veces usaba tanta fuerza que terminaba agrandando la cueva. Me preocupaba que la cueva se fuera a colapsar a nuestro alrededor, pero después de pensarlo un poco, decidí que incluso si fuese a derrumbarse, mi maestro, aun así, sería capaz de abrir un agujero para que saliéramos, así que no había de qué preocuparse.

En lo que respecta a Alstier, aunque declaró que ya no tenía energía por haber usado Vuelo para traernos hasta aquí. Cuando “accidentalmente” fallé en exterminar a un esqueleto que se dirigía hacia él, él ni siquiera se molestó en mirarlo, solo le lanzó un hechizo oscuro de nivel avanzado (Fuego Infernal) y lo chamuscó.

Como Fuego Infernal es un hechizo de largo alcance, el fuego accidentalmente se esparció hacia los otros esqueletos causando una enorme ‘hoguera de huesos’ que no podía ser controlada.

Fue entonces que lance una Cuchilla de Viento débil…… y me abaniqué. ¡Uf, sí que está caliente aquí!

Pero con esto fui capaz de obtener una idea real de que tan poderosos eran Alstier y mi maestro. No había sido solo suerte, el que hayan sido capaces de escapar completos de la guarida de un dragón, incluso en circunstancias tan precarias.

Alstier giró los ojos hacia mi cuando vio mi acción y preguntó exasperado “¿No te estás relajando demasiado?”.

Antes de poder contestarle mi maestro lo aplacó diciendo, “Alstier, tienes que tratarlo como un sacerdote.”.

“¡Ah!” Una mirada de entendimiento pasó sobre él y luego se disculpó conmigo, “Me disculpo, el sacerdote debe quedarse atrás en situaciones como esta. Pero, ¿por favor podrías enviar algunas Cuchillas de Viento en mi dirección? Hace bastante calor aquí.”

“Seguro.” Le envié algunas Cuchillas de Viento debilitadas antes de recordarle, “La próxima vez no utilices este tipo de hechizos en lugares cerrados. No solo hieren al enemigo (lo que está bien), sino que también te dañaras a ti mismo (lo que es malo).”

“Tiene razón.” Mi maestro estuvo de acuerdo conmigo, mientras se abanicaba con una de las hombreras de su armadura.

“Sí, siento haberles causado problemas con todo este calor.” Alstier se disculpó. Un elfo oscuro que admite sus errores y aprende de ellos, qué admirable.

Siguiendo con esto, ya que el fuego no parecía ceder pronto… probablemente porque tenía una constante fuente de energía (los muertos vivientes), los tres decidimos sentarnos ahí y esperar a que se disipara. Fue entonces que nos concentramos en preparar el almuerzo y utilizamos el ya listo suministro de “fuego” que teníamos para cocinar nuestra comida.

“No puede ser bueno utilizar el fuego que sale de cadáveres quemados para cocinar nuestra comida ¿o sí?” Preguntó Alstier mientras miraba la carne cocinada con disgusto. Luego continúo preocupado, “Sin mencionar que el fuego fue hecho de magia negra, no creo que sea seguro para consumo humano.”

“Aunque no sea bueno para consumo humano a ti no debería de importarte.” Le dije con hipocresía, “¡Ni siquiera eres humano!”

Alstier le dio vueltas en la cabeza a mis palabras antes de asentir, “¡Tienes razón!” Y entonces comenzó a comer la carne sin remordimientos.

Para cuando terminamos nuestra comida, el fuego ya se había hecho más pequeño. Así que continuamos nuestro camino, pasando sobre cenizas humeantes. En realidad no sabíamos hacia dónde ir, así que hicimos lo que sugirió mi maestro: nos fuimos por donde los muertos vivientes eran más fuertes y poderosos.

Avanzamos desde el nivel más bajo donde estaban los esqueletos vivientes hasta los aún más apestosos Come-cadáveres. Estas criaturas eran cadáveres a media descomposición con muchos trozos de carne podrida aun pegada a sus huesos. Aunque no pueden moverse muy rápido, llevan consigo un veneno mortal con el cual uno seria envenenado con tan solo tocarlos. Si no hay un sacerdote o no llevas alguna poción curativa contigo en el grupo, bueno pues, deberías comenzar a cavar tu tumba ahora.

Pero aun sin el conocimiento de su atributo venenoso, yo jamás me les acercaría. Aun estando a diez metros de ellos, podía oler su horrible hedor. Si me acercara a una distancia aproximable, creo que preferiría cortarme la nariz yo mismo. ¡A quién le importa su veneno!

“¡Urgh! ¡Ustedes horribles cadáveres apestosos! ¡Vayan a reunirse con la Diosa de la Luz y arrepiéntanse ante Ella por su descuido de la higiene personal!”

Pinchando mi nariz con una mano, lance un montón de Hojas de Viento intentando abanicar lejos todo ese hedor. Luego irradie una inmensa cantidad de luz santa, tan brillante que la cueva entera se ilumino por completo, como si un pequeño sol hubiese hecho explosión. Cuando se disipó toda esa luz, la cueva entera estaba libre de muertos vivientes e incluso el aire olía limpio y fresco.

Solté mi nariz y asentí con satisfacción. “Lo sabía. La luz santa es el mejor desinfectante y desodorante de ambientes.”

Después de eso nos encontramos con zombis,  podridos Canes Infernales, cadáveres chupa-sangre (creo que comúnmente les llaman vampiros), una criatura que parecía un enorme globo ocular, el completamente negro monstruo de las sombras…

Bueno, pues todo tipo de monstruos y demonios salían por la derecha e izquierda, pero fueron fácilmente eliminados por mi maestro. Y cuando algunas de las criaturas corpóreas se juntaban en grandes grupos, tenía la oportunidad de ver a Alstier liberar todo tipo de magia oscura sobre ellos, y con ello aprender algunos trucos de él para mí. ¿Que qué hacía yo? Bien, pues yo me encargaba de desinfectar a las criaturas oscuras espirituales (como el monstruo de la sombra) con mi luz santa.

Siguiendo nuestro camino por la cueva, nos topamos con otro grupo… Estaban siendo acabados por un gigantesco Esqueleto Guerrero y fue solo hasta que mi maestro intervino y exterminó a ese Esqueleto Guerrero, que pudimos ver a los cinco.

Eran un equipo estándar, con un guerrero, una arquera, un ladrón, una guerrera sacerdotisa y un poco común, druida. Los druidas a veces son llamados Hijos del Bosque, y su especialidad es transformarse en varios animales y la curación.

Cuando nos percatamos de su presencia, Alstier inmediatamente se puso su capucha para ocultarse y evitar algún conflicto innecesario.

Los cinco observaban a mi maestro en trance. Mi maestro, aunque algo sorprendido por verlos, inmediatamente portó una sonrisa “Solar” y dijo cálidamente, “Mis más sinceras disculpas. No vi que estaban allí, y robe su presa. Porque no hacemos como que ustedes acabaron con ellos y se quedan con el botín.”

Todos continuaron viendo a mi maestro. Las dos mujeres del grupo (arquera y sacerdotisa guerrera) lo miraban con ojos de adoración y amor; la mirada del guerrero estaba llena de admiración y asombro; el ladrón miraba la invaluable espada y la impresionante armadura que portaba mi maestro, con brillo en sus ojos; y el druida, era el más normal del grupo, ya que él miraba a mi maestro con sospecha, su cuerpo tenso por la desconfianza.

Aunque el líder del grupo era el guerrero, quien estaba parado al frente del grupo, estoy seguro que el verdadero cerebro detrás de todo es el druida.

“¿Ustedes son un equipo? ¿Un caballero, un asesino y un hechicero?” Preguntó el druida mientras nos fruncía el ceño.

“No, él es un sacerdote.” Dijo mi maestro mientras apuntaba hacia mí. Luego aclaró, “Y yo soy un caballero santo.”

“¿Un sacerdote?” Preguntó el druida desconfiado, “Pero lleva un traje de asesino.”

Mi maestro soltó una sonrisa llena de confianza y le respondió, “Ah, eso es porque su traje de sacerdote se le quemó mientras cocinaba, así que tuvo que ponerse eso.”

Entonces yo di un paso al frente y comencé a desinfectar los restos del Esqueleto Guerrero que estaban en el piso, convirtiéndolos en un montón de cenizas, dejando únicamente el botín: algo de armadura y una espada.

Asentí con la cabeza satisfecho, pero cuando alcé la cabeza vi cómo sus expresiones estaban pasmadas y fijas en mí.

Alstier se me acercó y susurró en mi oído, “Olvidaste decir los hechizos.”

¡Rayos! Lo olvidé.

Después de ver esta demostración de mi parte, incluso el druida asintió su cabeza algo aturdido, la idea de preguntar de dónde había sacado un atuendo de asesino, sin que hubiera algún asesino en el grupo voló por la ventana.

Pero, debo aclarar que lo que llevo no es un atuendo de asesino, sino uno de los atuendos que Alstier normalmente usa bajo su capa. Pero como es negra y algo pegada, es fácilmente confundida con un traje de asesino.

Fue entonces que el druida habló, “Este Guerrero Esqueleto les pertenece. A decir verdad, si no hubiesen llegado justo ahora, lo más probable es que habríamos sido incapaces de salir de esta cueva.”

Después de oír eso, volteé para mirarlos más de cerca. Se veían bastante maltratados, y agotados.

Amablemente les recordé, “Si ese es el caso, ustedes pueden salir ahora. Hemos acabado con todos los muertos vivientes tras nosotros, así que no deben encontrarse con ningún peligro en su camino.”

El druida sonrió agriamente. “Es imposible. Los muertos vivientes dentro de la cueva reviven al tercer día, la parte más lejana de la cueva ya debe de estar llena de ellos y a diferencia de cuando entramos por primera vez aquí, ya no estamos a nuestra máxima capacidad. No creo que podamos salir de aquí.”

Con eso el guerrero dijo arrepentido, “Lo siento chicos. No debí traerlos tan adentro.”

Tras escuchar eso sus compañeros lo consolaron diciendo, “No es tu culpa. Nadie sabía que nos encontraríamos con los Esqueletos Guerreros y los Canes Infernales, si no fuera por eso estaríamos bien.”

Mientras los observaba hablar entre ellos desanimados y resignados a su destino, no pude evitar interrumpirlos “Pero acabamos de matar a todos los muertos vivientes hace poco, así que no han tenido tiempo de regenerarse aún.”

El grupo se sorprendió ante eso y el guerrero preguntó, “¿Cua-Cuánto tiempo les tomó llegar aquí?”

Viendo que mi maestro se mantuvo en silencio y a Alstier le era indiferente al asunto, pensé sobre esto por un momento. ¿Cuánto tiempo nos tomó llegar aquí?

Finalmente respondí “Cerca de tres…”

“¿Qué? ¡¿Tres días?!” Los cinco estaban en shock. “¡Incluso siendo cinco a nosotros nos tomó una semana llegar aquí!”

“……” En realidad iba a decir que tres horas, a pesar de que nos había tomado solo treinta minutos. Qué bueno que no respondí claramente…

“Si solo les tomó tres días, ¡entonces es posible que los muertos vivientes aun no hayan resurgido!” Parecían extasiados ante la noticia.

“¡Así es! Porque no toman todo el botín y salen de aquí. No se preocupen, estaremos bien.” Dijo mi maestro mientras los apresuraba con la mano. Luego “amablemente” les recordó, “Apresúrense, porque si no los cadáveres revivirán antes de que puedan salir, y eso sería malo.”

Me le quedé viendo a mi inescrupuloso maestro, sin habla. En realidad, tenían tres días enteros para salir, hasta podrían irse arrastrándose de aquí y salir con tiempo de sobra.

Cuando escucharon las palabras de mi maestro, se apresuraron a recolectar el botín del piso, siguieron su sugerencia y salieron corriendo. Apenas tuvieron tiempo de gritar gracias, ya que se habían apresurado hacia la entrada a toda velocidad.

Los observé mientras tomaban su apresurada retirada. Probablemente jamás se aproximarán a este lugar otra vez. “No sabía que fuéramos TAN fuertes.” Susurré incrédulo.

Tras escucharme mi maestro rio y dijo burlonamente, “¿Quién crees que eres? ¿Quién crees que soy? ¿Y cuántos años de experiencia como hechicero crees que tiene Alstier?”

“Pero para ser honesto, este grupo no puede compararse con tu último grupo.” Agregó Alstier.

Luego continuó explicando, “Los guerreros son el Hijo del Dios de la Guerra y la famosa Mujer Guerrera (la princesa Ann); el arquero es uno de los Doce Caballeros Santos; y además tienen un guerrero sacerdote que puede aumentar la fuerza de los guerreros; y todo esto sin mencionar que tienen al Caballero Sol más poderoso de la historia (en hechizos divinos) como su sacerdote… si se proclamaran a sí mismos como Los Asesina Dragones, nadie podría acusarlos de pretenciosos.”

Después de escuchar eso me sentí aliviado. Todo este tiempo había estado secretamente preocupado por dejar a mi grupo, pero ahora que me dicen que están al nivel de asesinar dragones, mis preocupaciones disminuyeron. Incluso si se enfrentaran con algún problema ¡son capaces de lidiar con el perfectamente!

Y justo cuando me estaba sintiendo aliviado, la expresión de mi maestro se ensombreció y me regañó, “Pero nada es seguro en este mundo, hijo. Nunca sabes cuándo algo o alguien más poderoso que tú pueda aparecer.”

Incliné la cabeza derrotado, pero no estaba del todo de acuerdo con él. Quiero decir, ¿acaso hay algo más poderoso que un dragón en este mundo?

Probablemente debió darse cuenta de que se preocupaba por nada, pero aun así frunció el ceño y nos apresuró, “¡Continuemos! Entre más pronto acabemos esto, más pronto volverás con tu equipo. Tengo este mal presentimiento. Sin importar qué, uno nunca debe abandonar su equipo y rondar por ahí. Si no fuera porque en realidad te necesito para esto, jamás te habría alejado por tanto tiempo de tu grupo.”

Aunque no estaba muy preocupado por ellos, asentí con la cabeza. Ya sabía que Ann trataría de ganar tiempo para que su hermana la princesa Alice pudiera escaparse satisfactoriamente con su amado. Incluso si regresara ahora, ¡seria solo para ir en círculos! Así que no tenía prisa por volver.

Además, no tenía ganas de ser el tipo malo que separe al par de amantes. Cuando me encontré con ese súper guapo (¡mátenlo!) caballero oscuro, él no me atacó. Ante una persona tan razonable, me sentía aún más reacio a separarlos.

Mi maestro soltó un enorme suspiro y dijo, “Vámonos. Hablaremos cuando acabemos la misión”.

Asentí y lo seguí.

◊♦◊♦◊♦◊♦◊♦◊♦◊

Después de eso pasamos tres días yendo en círculos por la cueva, buscando la Serenidad Eterna.

Estos tres días fueron muy emocionantes y divertidos. Alstier me contaba muchas historias. Me habló de su hogar y sus experiencias después de partir para explorar el mundo exterior. Dejó fuera detalles personales, pero era de esperarse. Todos tenemos derecho a tener secretos.

A cambio yo le contaría historias interesantes acerca del Templo Sagrado, y él siempre escucharía con gran interés. Cuando contaba los eventos más recientes, incluso mi maestro reiría con nosotros.

Cuando mencioné el incidente con respecto a Roland, fui cuidadoso y analicé cada una de las expresiones de mi maestro, preocupado de que fuera a regañarme por llevar las cosas demasiado lejos y que luego me ordenara poner a Roland en una estaca y hacerlo barbacoa.

Pero después de escuchar mi historia, Alstier fue el primero en reír fuertemente. “Con razón no tienes prejuicios contra un malvado elfo oscuro. Cuando ya eres el mejor amigo de un Caballero de la Muerte, ¿qué es un simple elfo oscuro para ti?”

Mi maestro, por otra parte, tenía una expresión exasperada llena de cariño mientras decía, “En realidad te estas saliendo de control.”

“Maestro, usted no expondrá el secreto de Roland, ¿verdad?” Pregunté muy preocupado.

Después de un minuto de silencio me miró a los ojos y dijo seriamente, “Debes jurarme que no dejarás que abandone el Templo Sagrado y que lo exterminarás antes de jubilarte a los cuarenta.”

Estaba a punto de protestar en contra de matar a Roland, cuando mi maestro me interrumpió y dijo en un tono severo, “Ya habrá tenido veinte años adicionales de vida, es suficiente. A menos que desees que muera en manos de tu sucesor, tú debes matarlo mientras todavía tengas las bendiciones de la Diosa de la Luz. De no ser así, no tendrás suficiente poder para acabar con él. No después de pasar la Sagrada Espada del Sol al próximo Caballero Sol.”

Me quedé callado ante eso, y después de un largo momento de silencio, asentí. Aunque sentí que al llegar el momento sería incapaz de llevar a cabo la obra… pero lidiaré con eso cuando llegue el momento. ¡No hay que preocuparse ahora por algo que sucederá muchos años después!

“Siempre has sido de un corazón grande. Mientras no te dañen tú jamás alzarás un dedo en su contra, incluso cuando son las criaturas más peligrosas del mundo.”

Suspiró y luego acarició mi cabeza. “No puedo decir que este aspecto tuyo sea malo, ya que de no ser por este mismo aspecto, Alstier jamás habría sido tu amigo. Pero este atributo tuyo también es muy peligroso. Me preocupa que algún día debas pagar un enorme precio por esa afable naturaleza tuya.”

Agaché la cabeza, pretendiendo aceptar sus enseñanzas. De veras. Aun retirado no puede evitar seguir aconsejando a su pupilo.

“Hijo,” Me llamó. Cuando volteé a verlo, alborotó mi cabello como si aún fuese un niño pequeño y dijo suavemente, “sin importar lo que suceda, no olvides que sigo aquí.”

“Recuerda que también cuentas conmigo.” Agregó casualmente Alstier.

Mi corazón fue feliz al escuchar sus palabras pero no pude evitar quejarme “¡Ay sí! Maestro, usted desapareció el momento que me entregó el título. Si se hubiese quedado cerca por un poco más ¡no habría tenido que ir en contra de un rey y una princesa! De haber estado ahí, ellos probablemente se habrían callado y habrían hecho lo que se les decía y no habría tenido que romperme la cabeza pensando en una solución para el problema.”

Mi maestro me golpeó en la cabeza. “¡Mocoso! Ya estás bastante crecidito. ¡No puedes esperar que me quede a tu lado sosteniendo tu mano todo el camino! ¡Lidia tú mismo con pequeños problemas como esos!”

“Si a eso es a lo que llama un ‘pequeño problema’ ¿puedo saber exactamente con qué problemas puedo molestarlo? ¿No me diga que solo puedo llamarlo si tengo que enfrentar un dragón?….” Murmuré mientras sobaba el punto que había golpeado en mi cabeza. Tan solo obtuve un “giro de ojos” por parte de mi maestro y una risita ahogada por parte de Alstier. Con eso yo también comencé a reír. Incluso si hubiese que exterminar a un dragón, el Templo Sagrado movilizaría a todo el ejército y mis Doce Caballeros Santos estarían a mi lado. Con ellos ahí, no necesitaría molestar a mi maestro con nada.

Y así, bromeando y abriéndonos camino de un lado a otro, avanzamos hacia el interior de la cueva. Justo ahora mi maestro estaba lidiando con un muerto viviente por su cuenta y Alstier y yo estábamos atrás platicando.

“¡Neo es tan fuerte! Incluso entre mi gente, que es conocida por su habilidad luchadora, nadie podría comparársele”.

“Claro, él es el Caballero Sol más fuerte de la historia. Viendo lo fuerte que es ahora, ¿puedes imaginarte cuán poderoso era cuando aún tenía las bendiciones divinas de la Diosa de la Luz?”

“Tener las bendiciones de la Diosa de la Luz no importa ¿o sí?” Preguntó Alstier fríamente. “Incluso con bendiciones la habilidad de Neo con la espada no mejoraría ¿verdad?”.

“Er…” Observé cuidadosamente a Alstier. Parece que no le agrada mucho el tema de la religión. “Es cierto que sus habilidades con la espada no mejorarían, pero ser el representante de la Diosa de la Luz tiene sus ventajas.”

Este tema parecía molestar mucho a Alstier ya que respondió, “Aumentar tu aura santa no es razón suficiente para dedicar tu persona a la Diosa de la Luz.”

Moví mi cabeza hacia un lado mientras lo pensaba. Luego mencioné lo que me pareció el mejor ejemplo. “Justo ahora yo soy el trigésimo-octavo Caballero Sol, pero ¿sabías que de los previos treinta y siete Caballeros Sol antes de mí, ninguno ha muerto portando el titulo?”

Una expresión extraña pasó por su cara y luego preguntó incrédulo, “¿Estás diciendo que los Caballeros Sol no pueden morir?”

“Claro que no.” Gire mi ojos al escuchar eso y le dije exasperado, “Tan solo es muy difícil matarnos, eso es todo. Como estamos llenos de tanta aura santa, nuestras habilidades de auto recuperación son extremadamente fuertes. Mientras no recibamos una herida fatal, es muy difícil matarnos.”

En ese momento mi maestro se rio interrumpiéndonos. Y mientras continuaba destazando a todos los muertos vivientes a su alrededor agregó, “Se dice que el Caballero Sol de la décima generación recibió una herida en el pecho tan profunda que incluso alcanzó su corazón, y aun así sobrevivió.”

Alstier movió su cabeza sorprendido.

Yo le sonreí y dije “Así que como ves, con lo poderoso que es mi maestro, si aún tuviera sus increíbles habilidades de auto-recuperación, sería aún más invencible—”.

Me detuve repentinamente.

Alstier me lanzó una mirada. “¿Creus?”

Respiré profundamente antes de señalar al frente y decir, “Creo que hemos alcanzado nuestro destino. ¡Puedo sentir un aura de agua extremadamente poderosa a la vuelta de esa esquina!”

Al escuchar eso, mi maestro fácilmente lidió con el último muerto viviente. Luego alzó su espada y la mantuvo en esa posición por tres segundos antes de blandirla al frente……

Mi dorada cabellera y la blanca cabellera de Alstier fueron sopladas hacia atrás por la fuerza del golpe. Miramos estupefactos cómo repentinamente el camino al frente parecía ser explotado por cientos de pergaminos mágicos explosivos, uno tras otro, hasta que al fin el último *¡Bum!* se escuchó.

El lugar entero estaba arremolinado con polvo y escombros……

Mi maestro luego volteó a vernos y dijo alegremente “Bien ¡todos los muertos vivientes han sido exterminados! Hijo, ve y descansa un poco, y cuando estés listo purifica el lugar. No te preocupes por nada, yo estaré aquí para asegurarme de que ninguna criatura se acerque para molestarte.”

Alstier me miró y dijo estupefacto, “No creo que Neo necesite alguna de las bendiciones de la Diosa de la Luz. Nada puede matarlo así como es.”

“Creo que tienes razón.” Asentí de corazón.

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Traducido al Ingles: Lealynn
Traducido al español: Storyteller
Editado: Blacklily

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